Según el resultado que arrojó la Encuesta de Condiciones de Vida (ENCOVI) correspondiente al año 2016, al menos el 82 % de la población no tiene el ingreso suficiente para satisfacer las necesidades más básicas.
Durante una presentación realizada ante el Parlamento nacional, los investigadores y académicos mostraron diversas cifras en cuanto a la pobreza, salud, nutrición, empleo y seguridad ciudadana, las cuales dan como conclusión que durante el año anterior, Venezuela vivió el deterioro social más grande de los últimos 50 años, tomando como punto de comparación las naciones latinoamericanas.
El sociólogo Luis Pedro España, explicó que dada la recesión por tercer año consecutivo, la pobreza de ingresos alcanza una mayor dimensión: pobreza estructural, que en 12 meses aumentó tres puntos porcentuales.
“Puede parecer que es poco, pero la verdad es que en la cotidianidad es mucho. Esto significa que los muchachos han dejado de ir a la escuela, que hay personas que han ingresado de manera precaria en el mercado laboral porque no hay compensación social o incluso la remuneración salarial está muy por debajo del promedio”, argumentó.
Apuntó que a partir de la evaluación de 13 indicadores (empleo, vivienda, bienes, ingresos, educación, entre otros), se obtiene un 72% de pobreza multidimensional, lo cual continúa siendo un número alto para un país que recibió millones de dólares por concepto petrolero.
España considera que de generarse algún mejoramiento en la economía, deberá realizarse una intervención al Estado para ejecutar políticas sociales más profundas y eficientes, que permitan rescatar a los venezolanos de la pobreza estructural y coyuntural. “Habría que rediseñar las políticas para que se haga énfasis en las necesidades sociales y no en el rendimiento político”, subrayó.
En cuanto al área educativa, tomó la palabra la profesora Aritza Freitas, para mencionar que al menos 8 millones 432 mil personas-entre 3 y 17 años- participan del programa educativo, de los cuales un 88% asegura asistir a clases de manera regular contra un 17% que no acude al plantel; no obstante, cuando se consulta con el estrato más pobre de la sociedad, se tiene que casi la mitad manifestó faltar a sus actividades escolares por la falta de alimentos en sus hogares.
Salud
Por su parte, Marino González, médico de la UCV, cuestionó que el Gobierno tenga cinco años sin publicar cifras sobre mortalidad, que en las que se refieren a la materna, alcanzan el orden del 40 % en los últimos 18 años. Destaca además que Venezuela se ha convertido en uno de los países con mayor registro de enfermedades endémicas, con mayor ahínco en la malaria, que desde hace cinco años ha dejado 250 mil casos.
“Tenemos la tasa de inmunizaciones más bajas de América Latina, los casos de difteria tienen que ver con eso. Los elementos más sencillos que se aplican hoy en día, no las estamos haciendo”.
Alertó que el 65 % de lo que se gasta en salud, viene del bolsillo del venezolano, mientras que el 63 % no cuenta con un seguro que le proporcione la debida protección.
Desnutrición
Posteriormente, tomó la palabra la doctora y magister nutricional, Maritza Landaeta, quien advirtió que 9 de cada 10 manifiestan no tener cómo comprar alimentos; siete de cada diez han perdido en promedio 9 kilos, de los cuales 86 % hacen dos comidas o menos.
Señaló que la harina de maíz y trigo se vieron desplazadas por las hortalizas, por lo que la dieta actual está hecha a base de carbohidratos y tubérculos.
Para la especialista, la compra de alimentos se ha desplomado en gran medida, lo que da como consecuencia que la población más vulnerable: mujeres embarazadas, niños y adultos mayores, ingresen a los centros hospitalarios con desnutrición severa o en algunos casos fallezca por no recibir la debida atención.
