Los habitantes de la comunidad Simón Rodríguez de Barquisimeto, situada al oeste de la capital larense, esperan que lo prometido por la alcaldesa designada Teresa Linárez, durante una visita que realizó hace aproximadamente dos semanas, no se quede en solo palabras: las calles del sector esperan por asfaltado.
Esta localidad sufrió un grave colapso de sus tuberías de aguas negras y el mismo fue medianamente subsanado por la Hidrológica del estado Lara (Hidrolara), hace algunos meses; sin embargo, varias cuadras del sector quedaron casi intransitables tras los trabajos de la compañía regional.
Piedras y cráteres llenos de agua son el común denominador en las vías de la localidad.
“Nadie se quiere meter por aquí. Teníamos transporte público por la zona, pero ahora evitan pasar porque esto es un desastre”, denunció a EL IMPULSO el señor Víctor Carrillo, vecino de la Simón Rodríguez.
Explicó que la Ruta 3 y la Ruta 12 ahora se desvían de la comunidad por lo estropeada que está la calle 48 de la ciudad, específicamente entre las carreras 28 y 30.
Se han visto aun más afectadas las más de 100 familias que viven en la zona, cuando se toma en cuenta que la línea de Transbarca que pasaba cerca -La Piedad- fue paralizada.
“También es falta de nosotros mismos que no nos avocamos a reclamar, nunca nos ponemos de acuerdo”, criticó Carrillo, quien señaló que el consejo comunal ha hecho los llamados de atención de manera intermitente. Cada vez que presionan a un ente público, atienden sus peticiones.
Asimismo, pidieron soluciones a las autoridades regionales ante la inseguridad y la falta de iluminación de la comunidad.
“La alcaldesa vino y comenzaron a taladrar las calles, pero ya tienen perdidos más de dos semanas; no hemos visto maquinaria trabajando. Escoba nueva barre muy bien, pero todos estamos a la expectativa. Ojalá que no sea como los demás que prometen y se olvidan”, sentenció.
