El arte encuentra permanente cobijo en los remozados espacios del Museo de Barquisimeto.
La Casa Grande se nutre de las propuestas que hoy día atavían las principales salas del recinto.
El hecho creativo se ha dilatado, convoca a propios y visitantes.
De lunes a domingo, los espectadores pueden recorrer los pasillos del Museo, encontrarse con la sede de la Librería del Sur, la tienda de la Red de Arte y conferencias en el auditorio.
Se conoció que para el mes de junio, la Feria Internacional del Libro podría colmar de alegría literaria la institución.
Para todos los usuarios está abierta la oportunidad de realizar visitas guiadas. Sólo es preciso acercarse a las oficinas del recinto para su organización.
Próximamente, se abrirá el Cine Club y el Centro Interno de Documentación para los estudiantes e investigadores.
La Cruz de Mayo
Taimara Jiménez, coordinadora general del Museo de Barquisimeto, aprovechó la oportunidad para informar que actualmente se encuentran en la entidad cuatro interesantes individuales, producto de la alianza con otras organizaciones culturales.
Asimismo, convocó a todos los creadores larenses a participar en la exposición Arte en Cruz que se inaugurará en los espacios del Museo el día 3 de mayo a las 4:00 de la tarde.
“El tema de la exposición es la Cruz de Mayo como elemento central de la celebración de esta festividad tradicional religiosa venezolana, con su significado simbólico y la importancia estética de su presencia y decoración”.
Para participar, los creadores deberán elaborar una cruz tridimensional de 70 cm de alto por 50 cm de ancho aproximadamente, en cualquier material y técnica.
Esta muestra será el escenario que acompañará la celebración de la Cruz de Mayo.
Las piezas deben ser entregadas en la sede del Museo, antes del 30 de abril en horario de oficina.
“Invitamos a todos los creadores larenses a participar en esta exposición que nos permitirá apoyar la celebración desde múltiples visiones, materiales y técnicas, acompañando de esta forma la tradición desde el alma del arte”.
Cuatro individuales
Arte popular, fotografías como testimonios de hechos religiosos, culturales e históricos, pinturas y esculturas, componen el itinerario por el Museo de Barquisimeto.
David González, “Guaraposim-ple”, creador larense, descubre en Tú y Yo, un sólo corazón su alta carga expresiva, repleta de colores.
Este artista recicla todo a su paso para concebir infinidad de creaciones que tienen que ver con la identidad del venezolano. “David es un artista integral, que al igual que el arte popular, es libre, innovador. Su obra destaca por un impactante uso del color”.
Por su parte, la muestra fotográfica de Rodrigo Benavides, Contradicciones de la materia, concebida, desarrollada y dirigida a docentes, estudiantes, artistas y público general, “aborda el complejo tema de la ocupación del paisaje por parte de la chatarra y la basura desde la representación fotográfica directa, es decir, aquella que no sufre modificaciones ni trucajes, en blanco y negro y color”.
A partir de un viaje por el estado Lara en el año 1991, “se estructura un relato constituido por imágenes y textos breves que tiene como propósito inducir a la reflexión individual y colectiva en torno al deterioro ambiental y su repercusión en la vida contemporánea”.
Gracias a una alianza con el Museo Carmelo Fernández de San Felipe, es posible conocer la propuesta de Lourdes Peñaranda titulada Razas.
Distinciones sociales y el multiculturalismo latinoamericano, generan esta reflexión sobre las diferencias de origen entre los seres humanos.
“Se trata de una propuesta que a primera vista pareciera objetivamente fría, pero que nos invita a reflexionar sobre nuestra propia condición, haciendo que el espectador se busque y se reconozca a sí mismo en alguna de las composiciones específicas, según su procedencia particular”.
María de la Onza, desdoblamientos de un rito, es la otra individual de fotografía recientemente inaugurada.
El Museo Nacional de la Fotografía en alianza con la Casa Grande, procuró la exhibición de 60 imágenes en blanco y negro y a color, realizadas por el fotógrafo venezolano Gustavo Marcano, quien capturó las gráficas desde el año 2004. Las fotos son de carácter documental, y “expresan la visión personal del autor sobre el culto sin manipular de la escena fotografiada. La gran mayoría tomas fueron hechas principalmente en Quibayo y Sorte (estado Yaracuy)”. Coryatur y el Museo Carmelo Fernández auspician la muestra.
