En una noche en la que su equipo había fallado 27 de sus 31 intentos previos desde la larga distancia, cuando llegó la última posesión y “al filo de la chicharra”, el alero Luis “El Tsunami” Bethelmy no dudó en tomar el tiro de la gloria y darle un increíble triunfo a los Guaros de Lara (15-10) ante los Marinos de Anzoátegui (10-13), 88-85, en el Domo Bolivariano de Barquisimeto.
No había sido el partido de los anfitriones desde más allá de los 6.75 metros pero Bethelmy, que hasta el último cuarto ni siquiera había convertido un punto, apareció cuando más se necesitaba con su característica sangre fría para terminar con cinco puntos, seis rebotes y tres asistencias como titular en 29 minutos.
“Cuando llegó ese momento le había dicho a el Grillo (José Vargas): este tiro va a ser para ti o para mí. Los triples no estaban cayendo pero gracias a Dios esta vez me tocó a mí lanzarla y darle la victoria al equipo que es lo que más importaba”, declaró el dueño del dorsal 11 al final del compromiso.
Resaltó el rol que tuvo el armador exNBA estadounidense Nate Robinson en la posesión decisiva, con la pizarra 85-85 tras retomar la pelota –Robinson había perdido la bola justo antes- y así poder asegurar el tercer laurel consecutivo.
“El entrenador nos había dicho que defendiésemos hasta retomar la pelota y Nate (Robinson) la condujo muy bien agotando el reloj hasta los últimos segundos para que ellos no pudiesen volver a tenerla y responder”, explicó Bethelmy.
El oriental lamentó que el quinteto entrenado por Guillermo Vecchio no tuviese el rendimiento acostumbrado al atacar desde el perímetro pero consideró que en esas ocasiones también hay que enfocarse en el esfuerzo colectivo en otros aspectos del juego. “Nos tocó una mala noche pero hay que ayudar también en la defensa para poder conseguir la victoria”.
Y es que los larenses, que acostumbran a completar con lanzamientos perimetrales el buen trabajo que hacen para atacar en la zona pintada, esta vez confrontaron graves problemas, al errar 18 de sus primeros 19 tiros en una primera mitad que, pese a ello, dominaron por 42-33.
Los males prosiguieron a partir del tercer parcial e incluso un habitual verdugo, José “Grillito” Vargas, falló sus 11 intentos de la jornada. El propio Bethelmy había errado sus cuatro tiros previos desde zonas en las que suele anotar y a la quinta fue la vencida para amargarle la remontada a la tropa del puertorriqueño Tony Ruiz.
