Una noticia inquietante llegó a las instalaciones del Liceo Coto Paúl la mañana de este miércoles, la destitución del director que por más 16 meses ha ocupado el cargo, el profesor Galvani González, originó el rechazo de la comunidad educativa, que apuesta por un proyecto militarizado que desde sus inicios ha rendido sus frutos.
Estudiantes, padres y representantes se abocaron a las afueras de la Zona Educativa para protestar ante la medida y además reclamar la continuidad del sistema militar en el plantel, un proyecto que corre peligro de ser eliminado, a pesar de las peticiones de quienes hacen vida en el Coto Paúl.
“La comunidad teme que con mi salida se encuentre la excusa para cerrar el proyecto militar y volver a la educación de un liceo regular. ¿Qué es lo que quieren, que volvamos a una institución violenta o a repetir situaciones lamentables como en otras instituciones que los estudiantes se están matando entre ellos?”, se preguntó el profesor González.
Indicó que el problema con su gestión comenzó hace pocas semanas, debido a que la Dirección de Zonificación de la Zona Educativa informó que debían recibir un total de 324 estudiantes, quitando de esa manera el 10% correspondiente a la institución para asegurar el cupo de los repitientes, además de aquellos jóvenes que ya habían aprobado el proceso de nuevo ingreso.
“Me quitan la dirección del Coto Paúl pero no las ganas de luchar por la educación larense. Esta es una actitud de la jefa de la Zona Educativa que genera muchos conflictos, es una política que va en contra del espíritu de la educación bolivariana, que pide innovación, transformación de un pensamiento consumista y capitalista para crear una conciencia crítica al servicio de la patria”.
Destacó que desde la aplicación del modelo militarizado en el Coto Paúl se han mejorado diferentes áreas, entre ellas la incorporación de 500 nuevos estudiantes, completando un total de mil 300 liceístas, además de consolidar la estabilidad laboral de los educadores contratados, regularizar los pagos a los obreros del instituto, cese de las acciones violentas por parte de los estudiantes, reapertura del comedor con servicio del Programa de Alimentación Escolar.
Así mismo, se logró la habilitación de cuatro laboratorios de física y química, más dos de biología, mejoras a la infraestructura del liceo, convenios con la Misión Sucre y convenios con la Universidad de la Seguridad.
“Nunca me dejé manipular ni dejé hacer cosas ilegales en mi gestión. Hay situaciones que han venido pasando y que tengo pruebas de ello, con una depuración ilegal que se hizo en el sistema de informática del plantel, en donde se dejaba evidencia de que habían trabajadores que no pertenecían a la institución y cobraban hasta un doble sueldo, denuncias por las que me consideraron persona no grata. Eso no me quitará el carácter que he mantenido ante los últimos 27 años. Esto es parte de la dialéctica que debemos combatir”.
Descontentos
La comunidad educativa del Coto Paúl luego de la destitución del director, solicitó a la Zona Educativa dar continuidad al proyecto de educación militarizada.
Franklin González, uno de los representantes indicó que los jóvenes se encuentran motivados a seguir con este sistema que les ha permitido adquirir herramientas educativas y les otorga la disciplina y responsabilidad que necesitan.
“Esta es una canallada de la Zona Educativa, habíamos llegado a acuerdos, para incluir a todos los jóvenes, incluidos los zonificados y hoy nos encontramos con un director destituido y el retiro de los militares. Queremos que siga el proyecto y es una falta de respeto para los alumnos y profesores”.
Fotos: Daniel Arrieta
