Los pronósticos con respecto al desempleo para el 2017 no son nada halagadores, por el contrario, todo indica que seguirá acentuándose debido a que desde el Ejecutivo nacional no se toman medidas para incentivar el proceso industrial y comercial del país sino todo lo contrario.
Héctor Contreras, coordinador de la comisión reorganizadora de la Confederación de Trabajadores de Venezuela en Lara, está consciente de esa situación, producto de una serie de estudios técnicos sobre la materia.
Explicó que las últimas medidas tomadas desde Miraflores han provocado el cierre de numerosas industrias y comercios en el país, y Lara no ha escapado a esa situación.
Dijo que en la CTV Lara tienen informaciones fidedignas según las cuales una buena cantidad de empresas, sobre todo pequeñas, han sido cerradas en diciembre bajo la figura de vacaciones colectivas navideñas, pero sus directivos no están muy dispuestos a reabrir en enero por considerar que no hay condiciones económicas ni garantías para hacerlo.
Dio a entender que entre el empresariado persiste el temor de que en cualquier momento el gobierno decida la expropiación de una factoría con cualquier argumento.
Contreras precisó que todo ello afecta la operatividad empresarial y si no hay seguridad se afecta también la fuente de empleo.
Todo esto, agregó, sólo trae como consecuencia el crecimiento del comercio informal porque los jefes de familia se convierten en buhoneros para alimentarlas.
Igualmente informó sobre el proceso de reestructuración de la CTV que se está adelantando y ya se encuentra en el paso número 9, esperándose para enero la publicación de la lista preliminar de quienes aspiran a formar parte de la organización.
Denunció el intento por parte de algunos dirigentes que permanecían inactivos, de dividir el movimiento sindical convocando un congreso para nombrar unilateralmente una junta de conducción sin los verdaderos luchadores por la institución.
