Tras hacer una revisión con especialistas, con los dirigentes de Fedeagro y Fedenaga y las 200 cámaras que forman parte del sector productivo, la crítica situación de la producción de alimentos para el 2018 es preocupante, y todos coinciden en que las expectativas son poco alentadoras.
El pronunciamiento lo hizo el presidente de Fedecámaras, Carlos Larrazábal González, en el marzo del Consejo Nacional Ordinario de la organización empresarial, advirtiendo que el gobierno sigue atendiendo básicamente a la agenda política, y no a la solución de los graves problemas por los cuales atraviesa la población venezolana, cada día más empobrecida.
-Lamentablemente se sigue observando a un gobierno nacional, que no sale de la agenda política, que no corrige las graves distorsiones económicas que se están viviendo en el país y vemos como las proyecciones cada vez son peores, las estimaciones que hace pocos meses nos decían que la inflación podría cerrar entre 600% y 700%% ya se van por encima de los 1000% de inflación, y uno observa como el ejecutivo nacional no reacciona, no aplica correctivos, más bien sigue profundizando las causa, sigue emitiendo dinero inorgánico, sigue aumentando la liquidez de una forma desordenada, sino tomar ningún tipo de disciplina fiscal, sin abordar la economía desde un punto de vista profesional y con criterio económico y profesional, y fuera de las graves consecuencias que estamos viviendo ahora, esto se agrava con la aguda crisis agroalimentaria que estamos observando en los actuales momentos-, señaló Larrazábal.
Advierte que desde Fedecámaras continuarán haciendo propuestas, el sector industrial propuso un conjunto de ideas para la reindustrialización del país, el sector agrícola lo hizo esta semana de igual manera, el sector construcción sigue haciendo propuestas, anunciando la incorporación del sector número 15 a Fedeámaras, el sector de la Transformación de Alimentos, en cabeza de la Cámara Venezolana de la Industria de Alimentos, asegurando que los empresarios no se cansarán de continuar formulando alternativas para sacar al país adelante.
El gobierno sigue cercando la economía
En torno a las expectativas para el 2018, Larrazábal señala que revisar el aspecto económico, señalando que las empresas no tiene los medios para imprimir dinero, tampoco tienen las posibilidades de operar si no tienen los insumos y las opciones necesarias, el gobierno continúa cercando la economía cada vez más, continúa limitando la posibilidad de tener insumos, no hay acceso formal a las divisas desde el mes de agosto, la subasta N° 15 fue eliminada la semana pasada por el mismo gobierno nacional.
-Esto requiere una transformación política profunda, donde se logre el equilibrio fiscal, el monetario, donde podamos volver a tener acceso al financiamiento internacional, esto hay que verlo de forma profesional, no de forma política e ideológica, como el gobierno lo ha venido viendo hasta ahora-, señala.
Por otra parte, consultado en torno a las expectativas del diálogo entre el Gobierno y la oposición, Larrazábal indicó que Fedecámara apoya cualquier vía que nos lleve al diálogo, que nos lleve al consenso, y donde se logren acuerdos concretos y reales.
-Hasta ahora nosotros no hemos tenido un diálogo, solo hemos tenido un monólogo, donde el gobierno habla y todo el resto del país tiene que escuchar, para que un diálogo funcione, para que la vía del consenso funcione, tiene que haber una disposición de cambio, nosotros estamos analizando los casos exitosos que se han dado en otros países como el caso español, el caso peruano, lo que tiene que darse por la vía del consenso, pero el gobierno tiene que estar dispuesto a ceder, como los demás factores de la sociedad, también tenemos que estar dispuestos a ceder, porque la economía venezolana no aguanta más, el deterioro de la calidad de vida del venezolano ha llegado a niveles nunca vistos, y esto requiere que no sigamos simplemente en la misma discusión ideológica en la que hemos estado hasta ahora-, aseguró.
Se refirió a la visita que realizará a comienzos del próximo año una misión de la Organización Internacional del Trabajo, que viene a comprobar “ in situ”, las violaciones del gobierno a los acuerdos internacionales, indicando que espera que el gobierno entienda que las decisiones no son por la vía de la imposición, por la vía de los decretos, tampoco por la vía de las cadenas nacionales en donde se informa que es lo que tiene que ser, sino que debe ser por la vía del diálogo y el consenso.
