Los larenses siguen batallando fuertemente contra la COVID-19, tanto que pacientes en estado crítico deben tratarse en sus hogares porque los hospitales públicos no dan abasto para tantas personas o no están en condiciones óptimas para brindar una atención médica adecuada y, además, muchos no tienen los recursos para pagar una clínica privada.
Así lo denuncia la misma población ante los medios de comunicación, señalando que deben tratar a sus familiares en casa, incluso si están en estado crítico y requieren bombonas de oxígeno.
En Lara, recargar una de estas bombonas con el gas medicinal tiene un costo de 30 dólares y su demanda ha crecido vertiginosamente en los últimos meses, justo cuando la región atraviesa una nueva ola de contagios por COVID-19.
Esta situación ha sido reafirmada por Adolfo Pereira, quien ocupa la Gobernación de Lara. “Empieza la gente a pedir oxígeno, pero ¿por qué piden oxígeno? porque tienen al paciente en casa”, dijo el pasado 21 de junio durante su programa radial sobre la pandemia.
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El Colegio de Médicos señaló por su parte que las autoridades regionales «deben entender» que el oxígeno medicinal es el principal requerimiento que necesitan los pacientes críticos para tratarse contra la COVID-19.
«Hoy en día, los larenses se enfrentan a las adversidades de la falta de dotación de oxígeno medicinal y vemos cómo varias clínicas del centro de la ciudad (Barquisimeto) han cerrado sus unidades COVID por no contar con los requerimientos mínimos de oxígeno», dijo René Rivas, presidente del Colegio de Médicos, entrevistado por Elimpulso.com.
Compra de oxígeno en Lara
En la zona industrial I de Barquisimeto se ubica una de estas distribuidoras de oxígeno medicinal, en la que asisten hasta más de 60 personas por día, según relató uno de los compradores a Elimpulso.com.
“Llegan bastantes personas, como entre 50 a 60 bombonas durante la mañana (…) en el transcurso del día pueden ser más, vienen camiones, los centinelas también vienen a recargar aquí”, dijo Radel Montesinos, joven que en los últimos días ha tenido que batallar por la salud de su madre, quien se encuentra con COVID-19 y en estado crítico, hecho lamentó y le produjo tristeza al recordarlo.
Aseguran los usuarios que el llenado de la bombona de oxígeno puede tardar entre una hora a dos horas, dependiendo de la cantidad de personas que estén a la espera.
Son grandes los esfuerzos económicos que deben hacer los larenses para cubrir los gastos de cada llenado de bombona, que pueden ser diario en casos más exigentes. Además, quienes no consiguen prestamos de bombonas, deben alquilarlas y dicho costo puede alcanzar los 30 dólares por mes, indicaron algunos usuarios al equipo periodístico.
