Un nuevo estudio publicado en la revista PLOS Mental Health ha encontrado que los adolescentes diagnosticados con adicción a Internet muestran alteraciones en la comunicación entre regiones cerebrales clave. Estas alteraciones podrían afectar su capacidad de atención, memoria de trabajo y control de impulsos, funciones ejecutivas esenciales para el desarrollo y el bienestar de los jóvenes.
La investigación, que analizó datos de 12 estudios de neuroimagen realizados entre 2013 y 2022, destaca la creciente preocupación por la adicción conductual asociada al uso excesivo de Internet entre los adolescentes.
Los criterios para el diagnóstico clínico de esta adicción incluyen la preocupación persistente por Internet, los síntomas de abstinencia cuando se está lejos de la red y el sacrificio de relaciones personales en favor del tiempo en línea.
Los participantes del estudio que fueron diagnosticados con adicción a Internet mostraron una disfunción significativa en las regiones cerebrales asociadas con las funciones ejecutivas cuando participaban en actividades en línea. Estas alteraciones podrían tener repercusiones a largo plazo en el desarrollo cognitivo, emocional y social de los adolescentes.
Si bien los hallazgos son importantes, los expertos advierten sobre las limitaciones del estudio. La adicción a Internet no está oficialmente reconocida como un trastorno en el DSM-V, el manual diagnóstico utilizado por profesionales de la salud mental en Estados Unidos. Además, todos los estudios revisados se realizaron en Asia y contaron principalmente con participantes masculinos, lo que limita la generalización de los resultados.
La Dra. Eva Telzer, profesora de psicología y neurociencia en la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill, señala que todos los estudios se realizaron en un momento específico, lo que sugiere la necesidad de investigaciones longitudinales para comprender mejor los efectos a largo plazo de la adicción a Internet en los adolescentes.
