El gerente general de los Cardenales de Lara, Carlos Miguel Oropeza, resaltó que el grupo es fuerte en lo mental luego de lo sucedido en las últimas tres campañas. Lara fue eliminado en la 2015-2016 ante los Leones del Caracas en un juego extra efectuado el 30 de diciembre en la ciudad capital.
Posteriormente se recuperó en la 2016-2017 para avanzar de primero en la ronda regular y a su vez llegó a la final en el cual perdió en cinco compromisos ante las Águilas del Zulia. Mientras que este año volvió a terminar primero en la regular y dejó en el camino a Zulia y los Navegantes del Magallanes para llegar a una nueva instancia decisiva.
“Este es un equipo que se comenzó un proyecto desde hace unas cuantas campañas atrás y hasta ahora ha rendido frutos. Me remontó hace tres años cuando Ildemaro (Vargas), Juniel (Querecuto), Carlos (Rivero), Néstor (Molina), Raúl (Rivero, Jhondaniel (Medina) por mencionar algunos vivieron una campaña dramática al perder en un juego extra”, explicó Oropeza (hijo).
“Ver a todos esos muchachos llorando lo recuerdo muy bien luego de esa derrota se ha forjado un carácter importante. El año pasado vinimos y llegamos a la final. Ahora volvemos a llegar de nuevo a la lucha por el título y ahora creemos que el equipo está listo para cosechar esa siembra”. Lara ganó por última vez un campeonato en la 2000-2001 cuando dejó en el camino al Navegantes del Magallanes en seis juegos. “En una final puede pasar cualquier cosa pero ojala este grupo puede cantar ese gritó final de campeonato y el destino nos dirá si este equipo está para volver a crear una dinastía parecida para a la de los años 90”.
Enfocados
El ejecutivo destacó el enfoque del equipo y la ansiedad por comenzar la instancia decisiva. “Hay ansiedad normar por estas horas y ambos equipos saldrán con las mejores piezas. Seguro será muy emocionante y lo que significa estar en la instancia definitorio. Esperemos sea para nosotros el resultado final positivo”.
