Increíble maldad

-

- Publicidad -

Con frecuencia calificábamoslos gobiernos que tuvimos durante los cuarenta años de la república civil, como gobiernos malos, en el sentido de ineficientes, con cierto grado de negligencia, soberbia, partidismo agudo, con un nivel de corrupción que todos detestábamos y muchas fallas más. Hubo grandes fallas, en algunos casos en grado superlativo,unas más graves que otras, pero todos sabíamos que a medida que transcurría el tiempo, quienes gobernaban iban dejando de ser poder, puesto que se acercaba su final y su sustitución, se iban convirtiendo en gobierno anterior. Debo señalar, por razones de justicia, que los tres primeros gobiernos fueron buenos (Betancourt, Leoni y Caldera I) luego vinieron errores injustificables que le abrieron las puertas a Chávez, pero aún en los menos buenos, se mantuvo un cierto respeto a la institucionalidad, al adversario político y a la libre expresión de las ideas.

Pero hoy en día, no estamos frente a un gobierno malo como aquellos, estamos frente a un gobierno malvado, es decir, donde gobierna la maldad, donde no existen instituciones ni leyes, donde predomina la persecución a la disidencia como política de estado que incluye el atropello a quienes no militen o simpaticen con el régimen. Estamos presenciando una increíble maldad. La persecución que se ha desatado después de la recolección de firmas y su validación, no tiene justificación ni perdón de Dios. Empleados con muchos años de servicios, disfrutando de inamovilidad laboral por permiso post natal, funcionarios de carrera que no son de confianza ni son de libre nombramiento y remoción, han sido despedidos de sus cargos. El gobierno, además, hace alarde de esos despidos y anuncia que jefe que no despida a sus subalternos que firmaron, también serán despedidos. Todo en flagrante violación de la Constitución Nacional. Esos malvados algún día pagarán por eso.

- Publicidad -

No se le venderá alimentos a quienes hayan firmado. Peor maldad que esa habrá pocas, ya hay muertes por esa razón. La represión a las protestas por falta de alimentos y medicinas continúa en el orden del día. Niños, mujeres embarazadas, ancianos, discapacitados, han recibido crueles vejaciones por parte del régimen madurista. Los presos políticos no hay manera que sean beneficiados con alguna medida de gracia o se la ofrecen a cambio de algo, como la de desistir del referendo revocatorio contra Maduro. He visto también como se obstaculiza el desplazamiento de opositores, como el caso concreto de Capriles, María Corina Machado y Lilian Tintori. A esta última no la dejaban llegar a Mérida el viernes pasado. A todo esto se agrega ahora, la agresión física a jóvenes inocentes estudiantes del SeminarioSan Buenaventura de Mérida, quienes sufrieron, por parte de colectivos oficialistas, golpes, robos y fueron desnudados en una avenida de la ciudad. El Seminario Divina Pastora acá en Barquisimeto fue objeto de amenazas de invasión el domingo en la noche. La maldad es esa inclinación espontánea que alguien tiene de provocar el mal a otros individuos. A este régimen le sobra esa inclinación.

Pulsa aquí para apoyar la libertad de expresión en Venezuela. Tu donación servirá para fortalecer nuestra plataforma digital desde la redacción del Decano de la Prensa Nacional, y así permitir que sigamos adelante comprometidos con la información veraz, como ha sido nuestra bandera desde 1904.

¡Contamos contigo!

- Publicidad -

Apóyanos aquí

- Publicidad -
Artículo anterior
Artículo siguiente

Más leido hoy

- Publicidad -

Debes leer

- Publicidad -
- Publicidad -