Los valles de Aragua recopila como la Historia de Venezuela del siglo XIX, la fuente especial de un hecho que trasciende las fronteras de la valentía de un grupo de jóvenes universitarios dispuestos a arriesgar todo por la libertad y la justicia.
El 12 de febrero de 1814 la patria soñaba con desprenderse del poderío realista y bajo el protagonismo y bajo la responsabilidad del joven prócer caraqueño libraron la eximia Batalla de La Victoria.
José Félix Rivas se entronizó en el pensamiento de los 85 jóvenes universitarios y sin medrar temores ni endosar cobardías líbranos de una batalla escrita con la sabiduría de las letras que no prescriben. José Félix Ribas y sus bisoños jóvenes tenían que triunfar porque no era solo una posibilidad sino una obligación. José Félix Ribas asesta a la intromisión realista al revés histórico más relevante, valiente y de egregia venezolanidad y patriotismo.
El 12 de febrero de 1814 José Félix Ribas y los jóvenes eran el grito que vence la sombra y eran el verbo que venció al mutismo.
La victoria permanece en las mentes de los jóvenes venezolanos como axioma de un hecho solemne y magnánimo que exalta los valores de libertad, de justicia y de una profunda razón humana.
A los jóvenes venezolanos de la Venezuela del Siglo XXI, la victoria es el triunfo de un logro de profunda perseverancia y constancia.
Jóvenes, no entreguen su presente, ni emenden su futuro, Venezuela espera mucho de ustedes.
