La fluctuación constante de la brecha cambiaria en Venezuela ha impulsado a un número creciente de establecimientos comerciales a adoptar el euro como moneda de referencia para calcular los precios en bolívares, un fenómeno que ha sido analizado por el experto José Antonio Gil, fundador de la reconocida firma Datanalisis.
En declaraciones ofrecidas durante una entrevista en «Shirley Radio» del Circuito Onda, Gil detalló que, si bien la mayoría de los comercios continúan exhibiendo sus precios en dólares, el cálculo final en bolívares para las transacciones se realiza tomando la tasa del euro, que generalmente es más alta.
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«Aunque lo ponen en dólares porque es el formato al que el venezolano se ha acostumbrado –identificando ‘REF’ con el dólar–, el recálculo se hace a la tasa del euro», explicó el analista.
En la nota difundida por Unión Radio, Gil enfatizó que esta estrategia, si bien plantea consideraciones legales, es una medida de supervivencia para los comerciantes frente a la inflación y la devaluación que afectan la economía venezolana.
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«Los comercios deben garantizar la cantidad de bolívares que les permita reponer sus inventarios con dólares o euros. De no hacerlo, corren el riesgo de ver disminuida su capacidad de oferta de productos«, afirmó.
Restricción de liquidez
Según Gil, esta situación es consecuencia directa de la aplicación de una política antiinflacionaria basada en la restricción de liquidez, a la que se suman elevados impuestos.
«El panorama actual limita la capacidad de inversión de los empresarios. El crédito bancario, por ejemplo, es escaso y se concentra mayormente en grandes empresas manufactureras más susceptibles a la supervisión», señaló restricción de liquidez.
Por último, el experto consideró que estas iniciativas tienen el potencial de combatir la persistente escasez de divisas en el país.
«El gobierno ha firmado acuerdos con petroleras privadas de distintas nacionalidades para mantener y recuperar la producción petrolera que se había visto afectada. Esto podría aliviar la carencia de divisas que, en el pasado, generaba la situación con empresas como Chevron», concluyó.
