Este lunes 10 de octubre, el gobernador del estado Lara ofreció un balance tras lo ocurrido durante el fin de semana en la parroquia Juares del municipio Iribarren, donde las fuertes lluvias provocaron la crecida del Río Claro y otras quebradas, afectando a varios sectores.
Según Aldolfo Pereira, más de 11 sectores sufrieron la embestida del agua, donde más de 15 familias resultaron damnificadas y actualmente se encuentran en refugios solidarios.
“Hasta esta mañana hemos diagnosticado 137 familias afectadas (…) tuvimos la afectación de 136 viviendas, como voladuras de techo, caída de paredes, caída de puertas (…) en general, fueron afectadas 350 personas, mientras que 62 familias perdieron sus enseres”, expuso Pereira en rueda de prensa.
Durante el encuentro con los medios, el funcionario aseguró que tanto Protección Civil como otros cuerpos de seguridad se acercaron inmediatamente hasta la parroquia para atender a las familias.
Asimismo, dijo que este domingo 9 de octubre se acercó a las zonas afectadas y recorrió hasta 15 kilómetros, desde La Trinidad hasta Guayamure, para evaluar los daños y atender a los habitantes.
“Ya estamos nosotros haciendo el diagnóstico para hacer el abordaje respectivo, algunos se hicieron ayer (domingo), sobre todo con la parte de medicamentos y la aplicación de vacunas para proteger a la población”, señaló.