Apenas un par de partidos le han servido a la Vinotinto para revertir muchas opiniones en contra, robándose por ahora el rótulo de “selección sorpresa”, cuando apenas se han cumplido un par de fechas de la fase de grupos, pero ya con la clasificación asegurada a los octavos de final.
En medio del envidiable funcionamiento de grupo mostrado por los vinotinto, hay que hacer un aparte para sus individualidades, capaces también de resolver un encuentro en cualquier momento.
A los “legionarios” y referentes Adalberto Peñaranda y Yeferson Soteldo, quienes pisan firme en el extranjero, España y Chile, respectivamente, debe agregarse Sergio Córdova, oriundo de la ciudad de Calabozo en Guárico, salido de las canteras de Arroceros de Calabozo en el fútbol nacional, pero desde 2013 defensor de los colores del Caracas FC, al ser el máximo artillero en el Mundial de Corea del Sur.
El portador de la casaca 19 ha sido un virtuoso no solamente por la derecha, su posición natural, sino en todo al área frontal del arco rival, capaz y tenaz con sus regates en los espacios más reducidos para llevarse por delante a cualquier enemigo, bajo un solo propósito, sellar los triunfos de una selección a la que quiere, ama y siente con pasión.
