El presidente de la Cámara de Pequeños y Medianos Industriales de Lara, ingeniero Juan Pernalete, hizo referencia al impacto que ha generado la nueva Ley Orgánica del Trabajo en el sector de la pequeña y mediana industria.
Dijo que esta normativa cambiará de manera significativa al sector, específicamente por la reducción de la jornada laboral semanal, la cual de 44 horas pasa a 40 horas.
La disminución del horario de trabajo en el sector de la pequeña industria que cuentan con mano de obra intensiva, es decir, que no es tecnificada y depende mucho del trabajo particular, será uno de los aspectos que más nos impactará de manera significativa. Disminuir las cuatro horas semanales e incluir los dos días de descanso (sábado y domingo), impiden que las empresas puedan crecer y lo que logran es una disminución mínima directa de más del 30 % en su capacidad de producción, con respecto a posibles negociaciones, presentes o futura.
Explicó que los días sábados el sector productivo los utiliza para lograr flexibilidad para los trabajos especiales.
Otro aspecto que se debe analizar es la vuelta de la retroactividad de las prestaciones sociales. Pernalete dijo que la normativa laboral establece el reconocimiento de la retroactividad de las prestaciones desde 1997.
Ese proceso genera un impacto muy significativo para los capitales que los pequeños y medianos industriales tenemos. Por lo tanto, vamos a tener que requerir de financiamiento externo para pagar deudas, lo cual no es productivo y podría provocar el colapso financiero en muchas industrias. La actividad de los pequeños y medianos industriales del estado Lara está afectada por la falta de materia prima.
Pernalete explicó que con la creación del Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad) se dificultará más la situación para las empresas proveedoras y encargadas de abastecerlos de insumos importados, porque con las nacionales hay menos probabilidades de acceso.
La situación actual es que las pequeñas y medianas industrias, que antes acudían en busca de divisas, ahora deberán hacer un trámite más complicado, porque deberán invertir más tiempo porque todos acudirán a hacer la solicitud y existirá un sistema que priorice las necesidades y las demandas de los pequeños industriales.
Indicó que también es necesario establecer un mecanismo más expedito y efectivo para el manejo y asignación del control cambiario, especialmente para los pequeños y medianos industriales y empresarios quienes son los más afectados cuando se aplican mecanismos del (Sicad).
En otro orden de ideas y en vista de los comicios electorales, expresó que el nuevo Presidente de la República que quede electo este 14 de abril, debe establecer reglas claras para generar confianza, atraer inversiones al país y reactivar de esta manera el aparato productivo.
“Igualmente esperamos que se produzca un consenso nacional porque es indispensable que todos (Gobierno- empresa privada y la ciudadanía) conformemos un gran equipo y unifiquemos esfuerzos y voluntades para poder resolver las situaciones complejas con el fin de garantizar bienestar y menor calidad de vida para los venezolanos”.
