Propone que se lleve a cabo el venidero 8 de diciembre, fecha de los comicios municipales
El Bloque Parlamentario de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) se pronunció este miércoles tras la solicitud de Ley Habilitante efectuada en la víspera por el presidente Nicolás Maduro.
El vocero de la bancada opositora, diputado Hiram Gaviria, propuso que la Habilitante sea consultada al pueblo a través de un referendo. «No le tememos al pueblo, la petición de Habilitante debería ser sometida a referendo y que el “diputado 99 de verdad sea el pueblo venezolano, eso es lo que pedimos», dijo Gaviria.
El parlamentario explicó que el referendo consultivo está establecido en el artículo 71 de la Constitución Nacional y solamente faltaría que los factores políticos se pongan de acuerdo con la finalidad de solicitar el citado mecanismo. Añadió que dicha consulta se podría realizar el mismo día de las elecciones municipales, es decir, el próximo 8 de diciembre.
«La Carta Magna establece que las materias de especial trascendencia pueden ser consultadas a la población, por iniciativa del presidente de la República, la Asamblea Nacional o por no menos del 10 por ciento de la población inscrita en el registro electoral», recordó.
Una burla al país
Los diputados Tomás Guanipa, secretario general de Primero Justicia, y Miguel Ángel Rodríguez cuestionaron la referida petición de poderes especiales para el jefe de Estado. Guanipa señaló que en el discurso de Maduro se reflejó el nivel de putrefacción al cual ha llegado el actual gobierno.
«La descripción que hizo de la corrupción Maduro parecía que estaba hablando de los mismos funcionarios del Gobierno y sin embargo, a lo largo de su discurso, achacó la corrupción a los opositores y al resto de la sociedad y cerró, además, haciendo referencia a supuestos hechos de corrupción por parte de diputados de oposición, mientras que dijo que no hay ningún tipo de persecución política, que también se sancionará a los corruptos de cuello rojo y uno se pregunta ¿cómo puede burlarse así del país? No ha habido un solo caso de un pez gordo, de esos que conocemos, que ellos hayan acusado», apuntó el vocero de la tolda amarilla.
Añadió que Maduro dijo que la habilitante no se pedía para perseguir a nadie, mientras él tenía sentado al lado al diputado Richard Blanco quien estuvo un año preso sin haber hecho absolutamente nada. «Y, enfrente de mí estaba Biagio Pilieri, dos años preso sin siquiera tener un juicio. Del otro lado, estaba Nora Bracho, suplente de Mazuco, quien no se puede incorporar porque aun cuando ganó las elecciones no se lo permiten», indicó.
El diputado 99: Carlos Flores
El diputado por el estado Táchira, Miguel Ángel Rodríguez, recordó que la Fiscalía General de la República pidió que se evalúe el antejuicio de mérito a la diputada María Mercedes Aranguren. «No nos extrañe que en las próximas horas se cite una audiencia en el Tribunal Supremo de Justicia y que raudos, veloces y de manera inconstitucional, no solamente le sea levantada la inmunidad parlamentaria, sino que se le separe del cargo, con lo que entraría su suplente, Carlos Flores. Ese podría ser el mecanismo para que el oficialismo alcance el diputado número 99», dijo Rodríguez.
«Lo que está planteado en este instante es dar un zarpazo final, un golpe de Estado, la destrucción de la República en cuanto a democracia se refiere y el avance hacia la cuadratura de la república comunista, que le están dictando desde La Habana Fidel Castro y Raúl Castro a Maduro».
Otra burla
Copei divulgó un comunicado en el que informó su posición sobre la petición de habilitante por parte del presidente Nicolás Maduro con el propósito de luchar contra la corrupción. En el mismo denunció la pretensión del gobierno de endosarle a una supuesta guerra económica la razón para solicitar una ley habilitante para el primer mandatario nacional.
El partido socialcristiano argumentó que el Gobierno, lejos de promover una política que le cierre el paso al escandaloso desfalco que la corrupción ha causado a las finanzas públicas, ha promovido mecanismos parafiscales, institucionales y administrativos que han permitido el crecimiento explosivo de dicho flagelo, así como el consecuente envilecimiento de muchos sectores de la sociedad venezolana.
