La orden de la Superintendencia Nacional Agroalimentaria (Sunagro), de desviar entre 30% y 100% de la producción de alimentos, dependiendo de los rubros, hacia los locales de red pública, no solamente afectará a más de 80.000 negocios, también perjudicará a los consumidores quienes tendrán menos productos disponibles en los sitios en los que habitualmente hacen sus compras.
Así lo dio a conocer, en conferencia de prensa, el presidente de la Cámara Venezolana de la Industria de Alimentos, Pablo Baraybar, quien indicó que los rubros afectados por esta medida son leche, pastas, aceite, arroz, harina panadera y harina de maíz precocida, los cuales deberán ser despachados a los establecimientos de Mercal, Pdvsa, Bicentenario y otros que las autoridades han determinado.
En estos momentos, señala, la industria privada de alimentos abastece a la red pública, indicando que el 80% de los rubros que allí se comercializan, son marcas privadas. Dijo que existen quince veces más puntos de ventas en la red privada que en la red pública.
-Desviar la producción hacia la red pública, en detrimento del resto de los comercios, no resuelve en absoluto la situación de desabastecimiento, por el contrario, esta manipulación de la distribución afectará al consumidor, porque concentra la oferta en menos establecimientos, lo cual ocasionará colas aún mayores, precisó el representante gremial.
Señala que el Estado tiene capacidad de producción suficiente para abastecer a la red pública, por cuanto disponen de al menos 230 empresas.
Impacto de la medida
La orden de enviar buena parte de la producción de alimentos a la red pública de distribución, afecta a los consumidores, quienes en 78% acuden a las redes privadas para realizar sus compras, alertando que la medida generará más colas en los locales que tengan productos.
Ratifica que la medida impacta a más de 80.000 clientes a nivel nacional y a todos los que trabajan en la comercialización y distribución de alimentos; al retirar de la red tradicional todos los productos que se están determinando, habrá menos ventas en los comercios y menos productos para transportar a través de la red privada.
Como ejemplo citó el caso de Carora, donde la red privada tiene 943 puntos de ventas, correspondiendo un comercio por cada 196 habitantes. Si se desvía a la red pública, solo hay dos puntos, Pdval y Bicentenario y esto equivaldría a 92.000 personas por cada local.
Advierte que esto no va a permitir controlar o que se elimine el bachaqueo, sino que por el contrario se estaría favoreciendo este procedimiento.
Privilegiar la producción nacional
El presidente de Cavidea señala que es necesario privilegiar la producción nacional, garantizar el acceso oportuno y suficiente a las materias primas e insumos importados; fijar precios que permitan cubrir los costos y obtener una rentabilidad; reducir al mínimo la dependencia de las importaciones y establecer mecanismos que permitan a las industrias que están en poder del Estado, producir al 100% de sus capacidades instaladas, como lo viene haciendo la empresa privada. Solicitan una reunión urgente con el Gobierno.
-El gobierno no puede pretender, que la industria privada de alimentos no solo abastezca a la red privada de comercialización, sino también a la red pública. Debe poner a producir sus empresas.
