El camino para al Mundial Rusia-2018 será largo y difícil para Brasil, asegura el entrenador Dunga. Y el arranque será mucho más tenebroso cuando juegue sin Neymar sus dos primeros partidos.
La seleçao visita primero a Chile, el campeón de la Copa América con su “generación dorada” y una hinchada que quiere más. El partido será en Santiago el 8 de octubre, y cinco días después enfrenta a Venezuela en Fortaleza (noreste de Brasil).
Y ambos partidos Neymar los verá por la televisión.
Fue suspendido precisamente en Chile por mala conducta en el partido contra Colombia por la fase de grupos.
La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) aún espera por una decisión sobre un recurso en el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) que podría reducir la sanción del crack del Barcelona por lo menos en un juego.
“Nos gustaría contar con Neymar, pero no es posible. Debemos enfocarnos en los jugadores que van a contribuir con nosotros”, dijo el seleccionador Dunga en una rueda de prensa. La última vez que Brasil disputó una eliminatoria fue para Sudáfrica-2010, también bajo el mando de Dunga. “Llegó el momento más importante que es la eliminatoria y estamos preparados”, sancionó Dunga, que no obstante advirtió de las dificultades.
La mayoría de los jugadores nunca disputó una eliminatoria, y los recuerdos en torneos oficiales son amargos.
No sólo por el Mundial-2014, que dejó esa profunda cicatriz del 7-1, sino también por el pobre desempeño mostrado en la Copa América, donde terminó eliminado en los cuartos de final por Paraguay.
