Independientemente de la etapa de nuestras vidas en la que estemos, todos hemos experimentado algo que es totalmente cierto: estamos rodeados de situaciones muy cambiantes… Podemos tener 20, 40 o 60 años y vemos como día a día las situaciones, eventos o circunstancias nos llevan a tener que cambiar y adaptarnos muy rápidamente.
Las personas atravesamos situaciones complejas y difíciles en temas laborales, familiares o financieros y a la final, comenzamos a darnos cuenta de que es nuestra capacidad de adaptación a lo que nos ocurre y de reinventarnos continuamente, lo que nos permitirá llegar a ser exitosos… claro, hay quienes ni se molestan en hacerse consciente de lo que sucede en sus día día y van por la vida tipo “como va viniendo vamos viendo” pero ¡sin rumbo!
Reinventarse no es nada nuevo ya que mucha gente lo ha hecho desde hace siglos: gente innovadora, optimista y exitosa.
Hoy inclusive, vemos a emprendedores y empresas en un proceso constante de cambio y reinvención para poder satisfacer las necesidades de un nuevo mercado, de una realidad cambiante; y es que si más personas se reinventarán constante y conscientemente, nuestras sociedades saldrían más fortalecidas y se generarían oportunidades que nunca hubiéramos visto anteriormente.
Y ¿sabe qué? La decisión de reinventarse es una decisión personal… Debemos buscar nuestra misión, nuestros valores o buscar a gente que nos inspire y nos ayude.
Al hacerlo, nos daremos cuenta de las áreas de oportunidad y mejoras que tenemos por delante; identificaremos las metas que queremos alcanzar y fijaremos un plan de acción para hacerlo, y ya sea grande o pequeño, siempre se comienza con un primer gran paso.
John Maxwell, experto en liderazgo, dijo en su artículo Viviendo una vida útil que “la vida no es un ensayo; es una presentación en vivo.
Por ello debemos tener sumo cuidado en vivir una vida verdaderamente útil desde este preciso momento“.
Pregúntese entonces: ¿Requiero reinventarme para tener una vida útil o estoy a gusto con la que vivo? Piénselo por un momento…
Actívese ya
Es importante darse cuenta de quién es usted, qué relaciones tiene o con quienes las tiene, qué decisiones toma, cómo anticipa las experiencias con las que se va a encontrar y cómo podrá dejar una huella en los demás.
Nuestras vidas son muy variadas si las vemos como una serie de pequeñas reinvenciones continuas, por lo que debemos pensar claramente y de manera positiva en nuestras metas y en lo que queremos alcanzar.
Somos muchas las personas que buscamos reinventarnos pues deseamos que nuestro entorno, nuestra comunidad, nuestro país experimente una transformación positiva, una metamorfosis, pero hay que tener claro que esos cambios no ocurren de la noche a la mañana, se van dando poco a poco, mientras unimos nuestras ganas, ilusiones y trabajo proactivo.
Si le preguntaran ahora mismo qué haces tú para mejorar el país en el que vives, ¿estaría satisfecho con la respuesta?
Hay muchas personas que, como ud, tienen las mejores intenciones de que nuestro mundo sea cada día mejor, pero no se arriesgan a proponer sus ideas.
Todo inicio es ideal y representa una oportunidad para generar ideas e ilusiones, propuestas, desarrollos y planes, sea cuando sea.
No tema y arriésguese a renovar su vida, transformar su cotidianidad con lo que haya y tenga en su presentepara hacerla más placentera para ud y con quienes se relaciona.
Considere que todos los cambios que hagamos en nuestra vida, por más pequeños que sean, requieren de constancia, enfoque, dedicación y sobre todo, el compromiso -con nosotros mismos- para alcanzarlos, vibrando con lo que deseamos y proyectándolos como si ya fuesen un hecho. ¡Movámonos hacia adelante, reinventémonos y veremos los resultados!
Tome la iniciativa y reinvéntese en lo que será solo el primer paso de una vida más plena, motivada y posiblemente más feliz para usted y quienes le rodean.
