#OPINIÓN Se busca un emprendedor: Lee Iacocca creador de excelencias #29Oct

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“No me molesten con la filosofía, yo quiero ser millonario”

Lee Iacocca.

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Lee Iacocca murió el 2 de Julio de 2019 a la edad de 94 años. Nunca fue fiel a su lema juvenil. Si hubiese sido así, se habría convertido solamente en un hombre rico y no en uno de los Gerentes mas famosos e importantes de los Estados Unidos de América.

Sus padres, Nicola Iacocca y Antonietta Perrotta, partieron en los años vente de Italia y se establecieron en Pensilvania, estado del acero.

Su papa comenzó vendiendo perros calientes y más tarde logro iniciar una de las primeras agencias de alquiler de vehículos en Allen Town.

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Lido, uno de sus dos hijos, inicio en ese momento a familiarizarse con los autos. Con un físico frágil, evito la posibilidad de enrolarse en el ejercito americano y participar en la Segunda Guerra Mundial.

Con una inteligencia brillante, fue capturado por los buscadores de talentos de la Ford, mientras estudiaba Ingeniería en la Universidad Lehigh a Bethlehem, en Pensilvania.

Iacocca no construyo automóviles, pero si los invento, no con accesorios materiales, sino trabajando en la imaginación y la sugerencia. Su modelo más ganador continua siendo el MUSTANG, producto estrella de la fabrica Ford de Detroit.

El MUSTANG fue un auto que convenció a miles y miles de jóvenes americanos y en todo el mundo, que era suficiente acostarse en la cabina para sentirse modernos, deportistas y aventureros.

Lido, mientras tanto, había decidido de ajustar inclusive su nombre en aquellos años de estruendoso desarrollo, así se convirtió en Lee Iacocca.

En 1964 con cuarenta años, aparecía en las portadas de las revistas Time y Newsweek. Viajaba con su Boeing privado, hablaba con muchos periodistas, frecuentaba las fiestas con Frank Sinatra, dialogaba con todos los políticos, ganaba y gastaba mucho dinero.

Este estilo de vida no le gustaba a Henry Ford II, nieto del fundador de la fabrica automovilística Ford, quien lo despidió en 1978.

Pero el segundo Iacocca fue aun más brillante que el primero.

Acepto entrar en la Chrysler, aunque la empresa estaba visiblemente hundiéndose. Y así puso en camino una audaz operación político-financiera. Pidió préstamos a los bancos, apoyándose en las garantías firmadas por el propio presidente de los Estados Unidos de América Jimmy Carter a quien había convencido, de que era mas barato para el gobierno apoyar a la empresa ante la posibilidad de salvarla, que tener que pagar salarios caídos a toda la plantilla de la Chrysler. Su plan de reestructuración fue muy feroz, pero logro convencer incluso a los sindicatos, que no había otro camino. El resultado fue que la Chrysler permaneció de pie y los prestamos fueron pagados hasta el ultimo centavo de dólar.

Definitivamente, Lee Iacocca es uno de los mas importantes Empresarios Internos que han existido.

Italo Olivo

www.iolivo.com

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