El Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), aprobó con 20 votos a favor una resolución presentada por las misiones permanentes de Brasil, Canadá, Colombia, Estados Unidos, Guatemala, Paraguay, Perú y Venezuela.
La resolución se basa en 3 puntos específicos:
1- Condenar el uso de la fuerza y de tácticas intimidatorias por el gobierno en disputa de Nicolás Maduro para tratar de impedir que los diputados de la Asamblea Nacional asistan libremente a la sesión convocada para el 5 de enero con el fin de elegir democráticamente su Junta de Gobierno.
2- Recibir con beneplácito la elección de Juan Guaidó como presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela.
3- Renovar el llamado para un pronto retorno a la democracia en Venezuela y, en ese sentido, reafirmar la necesidad de celebrar elecciones generales incluyentes, libres, justas y transparentes, dirigidas por un Consejo Nacional Electoral renovado e independiente seleccionado por la Asamblea Nacional de acuerdo con la Constitución venezolana y por una Corte Suprema de Justicia renovada e independiente, con la presencia de observadores internacionales independientes.
Asimismo, 5 países miembros votaron en contra y 8 se abstuvieron de aprobar la resolución, entre esos Uruguay, cuyo embajador, Fernando Gustavo Sotelo, dijo que no es parte de los estatutos de la OEA inmiscuirse en asuntos políticos internos de los países miembros.
La OEA ha sido clave en visibilizar y ejercer presión para poner fin a la crisis que atraviesa Venezuela. A su vez, la mayoría de sus miembros apoyan al gobierno encargado que lidera Juan Guaidó.
El régimen de Nicolás Maduro en Venezuela retiró el pasado año su representación en la OEA. Maduro ha tildado al organismo de ser «el ministerio de las colonias de EE.UU.» y de actuar de modo «injerencista e irrespetuoso de los principios democráticos y el derecho internacional».
El diplomático venezolano Gustavo Tarre Briceño es el representante actual del gobierno encargado de Venezuela ante la OEA.