La empresa norteamericana pretende añadir dos plataformas de perforación a principios de 2024, con el objetivo de aumentar la producción de petróleo a 200.000 barriles por día (bpd) para finales de año, como parte de la primera gran campaña de perforación tras el reinicio de relaciones con Venezuela.
Para la fecha, los esfuerzos conjuntos de Chevron y PDVSA producen aproximadamente 135.000 bpd, por lo que, la meta es añadir 65 mil barriles diarios a la producción.
Los flujos de crudo actuales representan el 70% de la producción promedio del país en 2022, de los que se han exportado 124.000 bpd a Estados Unidos (2023), aproximándose a los niveles previos a las sanciones del gobierno norteamericano a los representantes de la administración de Maduro.
La campaña de Chevron requiere al menos dos plataformas de perforación especializadas que podrían no estar disponibles en Venezuela, por lo que iniciarán el proyecto en la región productora Petroindependencia en la Faja del Orinoco, así como Petropiar en la Faja del Orinoco también y Petroboscan cerca del lago de Maracaibo, con el objetivo de perforar dos pozos por mes en el Orinoco.
La contribución de la empresa norteamericana a Venezuela permitirá que el país recupere la estabilidad en la producción petrolera, además de los 3.000 millones de dólares que tiene la empresa en el país, en dividendos impagos y deudas por los proyectos.
