El reconocido investigador gastronómico, Miro Popic, recientemente visitó la ciudad de Barquisimeto y al ser consultado por El Impulso sobre lo representativo de la cocina nacional en la temporada decembrina, comentó que cada región y país tiene su propia mesa.
“En el caso de Venezuela, yo creo que debe ser el único país del mundo, que a la misma hora, el mismo día, tanta gente se sienta a comer lo mismo, cosa que no ocurre en ninguna otra parte del país”, haciendo alusión a la hallaca.
Aseguró que el 25 de diciembre, en cualquier parte del mundo donde exista un venezolano, “que ahorita hay 8 millones de regados por el mundo, alguien estará haciendo/comiendo una hallaca y si no tiene cómo hacerlo, estará pensando en una hallaca”.
En este sentido, resaltó la importancia que caracteriza reunirse en torno a este plato, “nos une la autoestima venezolana envuelta en hoja de plátano, atado con un pabilo. El pabilo con que atamos las hallacas, unimos nuestra identidad y nuestra autoestima alrededor de un plato milenario prehispánico como es la hallaca”.
El también periodista y escritor, al hacer una evaluación de la cocina venezolana actual, indicó que “es muy bueno, la cocina venezolana en este momento está pasando un gran momento”.
Ante esto, explicó que aunque “tenemos grandes problemas en el país y una gran parte de la población que no tiene cómo alimentarse; ese es un problema económico, es un problema social y es un problema político. Pero en la culinaria venezolana hay un desarrollo y son precisamente en las épocas de dificultades y de carencia donde tú tienes que desarrollar la imaginación y llevarla a la cocina para con lo poco que tiene hacerlo lo mejor que tiene”.
A su vez destacó que hace 50 años no se hablaba de cocina venezolana, “no existía la cocina venezolana. Hoy en día existen escuelas de cocina venezolana. Hay montones, miles de chefs, cocineros venezolanos en Venezuela y repartidos por el mundo ganando premios. Nunca se había escrito tanto sobre cocina venezolana. Yo acabo de publicar siete libros de cocina venezolana en los últimos diez años, cosa que no existía antes”.
Todo esto lo resumió diciendo: “La cocina venezolana goza de buena salud y está en buenas manos: los cocineros de la cocina pública venezolana”.
Popic presentó su libro Leer para Comer, en el que entre preparaciones e historia gastronómica, concentra 14 ensayos de culinaria venezolana, el cual pueden adquirir en las principales librerías del país o a través de su cuenta en Instagram @miropopiceditor