José Gregorio Hernández, el médico de los pobres, es símbolo de fe y esperanza. Nació el sabio en Isnotú, estado Trujillo, el 26 de octubre de 1864 y siendo apenas un adolescente es enviado a Caracas a estudiar en 1878. Allí cursa el bachillerato y se gradúa en 1882 y de doctor en medicina en 1888. Entre sus logros resalta la introducción del uso del microscopio en Venezuela.
Desde siempre Barquisimeto ha sido un pueblo de profundas convicciones religiosas y hace más de siglo y medio su fe lo llevó a suplicar a la Virgen María por su salvación. La población sucumbía ante una terrible epidemia de cólera llegada desde Europa.