El lanzamiento por parte de sujetos desconocidos de una bomba molotov hacia el interior de la habitación de una vivienda ubicada en el barrio Brisas del Norte II, en la parroquia Unión, la noche del pasado martes 5 de mayo, cobró un víctima al mediodía de este viernes.
Se trató del fallecimiento de un pequeño de 12 años de edad, quien junto a sus hermanos de cinco y nueve años, y su madre, Crisaibi Carolina Cordero (29), sufrieron quemaduras en sus cuerpos el día del hecho, tras desatarse en un incendio dentro del cuarto justo donde se encontraban, producto de la explosión del artefacto de fabricación rudimentaria, cuyo fuego se esparció rápidamente y los envolvió a todos.
La tristeza embargó ayer el seno familiar del pequeño cuando sus integrantes se enteraron de la fatídica noticia, cuyo hecho inicial aún conmueve a la sociedad larense.
