Una llamada anónima realizada a las 12:40 del día a los cuerpos de seguridad alertó sobre la presencia del cuerpo sin vida de un hombre, a 500 metros de la entrada de El Cercado, por la vía hacia Caseteja.
Quienes pasaban por allí no se percataban del cadáver, pues el cuerpo se confundía entre la basura, estaba tirado del lado derecho de la carretera, muy cerca de una caja de cartón. En el lugar no había curioso alguno, estaba desolado, custodiado por un funcionario de la Guardia Nacional y efectivos de la Policía.
La víctima no poseía identidad alguna. Se trata de un joven con una edad comprendida entre 28 a 34 años, de contextura media, mide aproximadamente 1,75 metros de altura, es de tez morena.
El cuerpo estaba boca arriba con sus manos hacia atrás, claramente se veía que estaba maniatado para ello usaron un precinto plástico. Del lado derecho de su cuerpo, en un charco de sangre, estaba tirada una franela de rayas azules, rojas y blancas. Tenía ropa interior color negro y llevaba puesto sobre él un paño blanco, además un blue jeans que le llegaba hasta las rodillas y zapatos deportivos beige, marca Tommy.
Se le apreciaba en todo su estomago una cicatriz larga producto de una operación, en la parte baja del lado izquierdo tiene un tatuaje que dice Santiago y en su pectoral otro con el nombre de Eva, fecha 23 de septiembre del 2011. Sobre la cadera del lado derecho tenía otro tatuaje (una corona) y en la espalda dos más (siluetas), una parecía ser de una niña y un hombre.
Del lado derecho se observaron cuatro conchas, que pertenecen a una pistola calibre 9 milímetro, tres estaba sobre una caja y otra en la vía. Se presume que el crimen se consumó en ese mismo lugar y entre la noche del jueves y madrugada del viernes.
La causa de muerte al menos diez impactos causados por el paso de un proyectil se le apreciaron entre el rostro y el cuello a la víctima fatal.
El hombre que fue ajusticiado en la vía a Caseteja, le faltaban los ojos, allí recibió disparos, además le dieron uno en la boca que le tumbó los dientes.
Funcionarios del Eje de Homicidios del Cuerpos de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc) acudieron al lugar e hicieron el levantamiento del cuerpo, iniciaron las averiguaciones y esperan en las próximas horas identificar a la víctima, para tener mayores detalles sobre lo sucedido y determinar quien pudo actuar con tanta saña.
Al cierre de esta edición, el occiso fue identificado como Pedro José Guillamón Silva, de 27 años. Unos sujetos lo interceptaron en El Cují y horas más tarde, se produjo el macabro hallazgo.
