Los cañicultores de todo el país se encuentran declarados en emergencia ante la difícil situación que vienen confrontando por los reducidos ingresos recibidos por cada zafra “arrimada” a los centrales azucareros.
Durante el fin de semana se llevó a cabo en Barquisimeto, concretamente en la sede de Socatur, un directorio ampliado de la Federación de Cañicultores de Venezuela (Fesoca), en cabezada por su presidente, José Ricardo Álvarez Yépez.
Allí se debatió el problema del país que corre el riesgo de quedar sin el dulce en un plazo no mayor de un mes debido a que los centrales solamente disponen de 19 mil toneladas de azúcar cruda y el consumo asciende a 90 mil toneladas.
En la actualidad la mayoría de los centrales están dedicados al procesamiento de azúcar cruda importada debido a que para los agricultores nacionales ya no es rentable la siembra de caña por los bajos ingresos.
Ese problema se viene presentando desde el 2003 cuando, debido a los bajos precios, muchos cañicultores se han dedicado a otros rubros que les rinden mayores beneficios, contrario a la caña de azúcar, cuyo rendimiento no alcanza para cubrir los costos.
Como consecuencia de la merma en la producción, centrales como el de El Tocuyo han estado parcialmente paralizados por falta de materia prima, además del mal estado en que se encuentran sus obsoletos equipos, como lo han denunciado en reiteradas ocasiones los productores afiliados a Socadol y Asocaña, las dos asociaiones existentes en el municipio Morán, a través de sus directivos principales, Edgar Contreras y Dioli Silva.
Los productores de caña de azúcar solicitaron una reunión urgente con el nuevo ministro de Agricultura y Tierras, Wilmar Castro Soteldo, para tratar toda la problemática que les afecta y que amenaza con dejar al país sin azúcar.
En primer lugar se tocaría el punto de lo que están recibiendo por cada kilo de materia prima que “arriman” a los centrales de los cuales actualmente solamente dos de los administrados por la Corporación Venezolana de Alimentos-Azúcar, Tolimán, en Acarigua y Guanare, están funcionando pues los otros, como el Pío Tamayo, de El Tocuyo, se encuentran en muy malas condiciones.
En esa reunión insistirán en la revisión de los precios del producto a nivel de agricultores lo que, indudablemente, se traducirá también en incremento al consumidor.
En Venezuela quedan actualmente 16 centrales azucareros de los cuales sólo seis son privados, entre ellos La Pastora, Carora y Turbio, en Lara.