Cientos de escaladores y sus guías sherpas escalaron el Monte Everest este mes en Nepal, luchando contra el duro clima para llegar a la cumbre de la montaña más alta del mundo antes de que termine la temporada de escalada a fines de mayo.
Aunque varios escaladores lograron llegar a la cumbre a mediados de mayo, las condiciones climáticas se deterioraron durante días, obligando a muchos a retirarse al campamento base, incluido Kami Rita Sherpa, que intentaba romper su propio récord al escalar el pico por 31.ª vez.
Logró escalar el pico de 8.849 metros (29.032 pies) el 27 de mayo, pero varios escaladores no tuvieron tanta suerte.
La ruta a la cumbre está equipada con escaleras y cuerdas, pero éstas se retiran a fines de mayo, lo que marca el final de la temporada de escalada antes de que el monzón traiga fuertes lluvias y mal tiempo.
Según el Departamento de Montañismo de Nepal, a finales de mayo se concedieron permisos para escalar el Everest a 468 escaladores extranjeros de 57 países, junto con un número aproximadamente igual de guías de montaña nepaleses.
La escalada se detiene en el campamento base
Debido a las limitadas ventanas de buen tiempo cerca de la cumbre, un gran número de escaladores se alinearon, sujetos a la única cuerda de seguridad, en lo que se conoce como el “atasco del Everest”.
“En general, en el Everest, el clima es clave y no coincidió con el pronóstico. Además, estaba abarrotado de gente porque tanto profesionales como principiantes estaban allí al mismo tiempo”, dijo Pasang Rinji Sherpa, un guía, y añadió que, debido a la presencia de algunos escaladores novatos, el movimiento era lento.
Dijo que sólo se debería permitir subir a la cima a escaladores seleccionados o calificados para que la experiencia sea más segura y fácil.
“Ahora mismo hay principiantes sin experiencia ni conocimientos y profesionales al mismo tiempo, y esto es lo que causa el problema”, dijo. “Debería haber conocimientos básicos para que los escaladores usen el equipo correctamente y estén seguros al escalar el Everest”.
