Desde la medianoche, los nuevos aranceles impuestos por el presidente Donald Trump han entrado en vigor, intensificando la guerra comercial que libra desde su regreso al poder. Esta medida afecta a la mayoría de los socios comerciales de Estados Unidos.
El presidente ha calificado estos aranceles como «recíprocos», y su objetivo es reducir el «gran déficit» comercial del país. La medida aplica tanto a naciones con las que Washington llegó a acuerdos, como el Reino Unido, la Unión Europea y China, como a otras que no lo hicieron, entre ellas India, Suiza y Venezuela.
Aunque la mayoría de los países han logrado rebajas en sus aranceles, algunos enfrentan alzas significativas. Canadá, por ejemplo, ve un aumento del 25 % al 35 %, mientras que Brasil enfrenta un arancel del 50 % por un trato «injusto» a su aliado, el expresidente Jair Bolsonaro.
México es una de las excepciones, ya que logró una extensión de 90 días para seguir negociando. Mientras tanto, las conversaciones continúan con China para alcanzar un acuerdo definitivo antes del 12 de agosto.