Cuando escuches un largo escándalo de aves como las guacharacas, no su bullicio habitual, sino algo aún más escandaloso, es muy probable que el águila tirana esté cazando a una de ellas.
El veneno de esta rana es capaz de causar síntomas de entumecimiento muscular y problemas cardiorrespiratoria en humanos. Su coloración es llamativa y aposemática (con ella alerta a los depredadores de que no intenten comerla, por ser venenosa).
Esta activa cazadora nocturna pertenece a la familia de las garzas, frecuenta las orillas de ciénagas, pantanos y manglares con suficiente vegetación para posarse