Familiares de Reymerth José Henríquez Duarte, uno de los cuatro jóvenes abatidos por el Cicpc la tarde del viernes en Pavia, estaban en las afueras de la morgue esperando por la entrega del cuerpo de su ser querido. Muy afligidos se veían. Expresaron que todos eran personas de bien, sumamente sorprendidos por lo sucedido.
Una tía de Henríquez Duarte comenta que el joven era mecánico y la tarde del viernes unos amigos de la infancia lo fueron a buscar a la casa, para que le revisara unos repuestos que iban a comprar. El muchacho buscó su caja de herramienta y se fue con ellos, pero no regresó más.
La tía, quien no quiso identificarse, contó que a eso de las seis de la tarde llamaron del teléfono del joven, se identificaron como funcionarios del Cicpc y le dijeron que estaba en el CDI de Los Olivos, más no le dieron explicaciones. Cuando llegaron al centro asistencial no sabían qué pasaba pues no se explicaban qué hacia el joven por Pavia, cuando reside en la Rómulo Gallegos, en Cabudare, municipio Palavecino.
Estaban confundidos. Ni se imaginaban qué pasaba pues Henríquez Duarte no era una persona de estar involucrada en actos delictivos.
“A mii sobrino le costó la vida no saber decir que no, él era una persona muy noble que a todos ayudaba. Estoy segura que no sabía para dónde iba y que los repuestos que iba a revisar eran robados”, precisó su tía.
Franklin Saavedra, dirigente y reconocido locutor de Sanare, municipio Andrés Eloy Blanco, da fe que este joven no era ningún delincuente, inclusive su padre es el director administrativo del Hospital de Sanare.
“Creo que estaba en el momento equivocado”, precisó Saavedra. Comentó que el hecho debía ser investigado porque el fallecido no portaba arma alguna.
El joven fallecido era el mayor de cuatro hermanos y deja una pequeña de dos años de edad.
Por otra parte, Rocío Urriola, hermana de Antonio José Colmenárez Urriola (36), otro de los abatidos, dijo que él tenía tiempo viviendo en el oriente del país, se dedicaba a la venta de prendas, llegó a la entidad antes del 24 de diciembre y la pasó con su familia. Hace al menos una semana había sido invitado por Dilver Elías Torrealba Santos, a su vivienda en Pavia, lugar donde tenía poco tiempo residenciado.
El hoy occiso era el segundo de tres hermanos. Deja dos hijos huérfanos de padre, de 14 y 15 años de edad.
Versión del hecho
Según las explicaciones del cuerpo detectivesco, Torrealba Santos en compañía de Colmenárez Urriola, habrían ido a Cabudare a buscar a Henríquez Duarte y se trasladaron hasta Pavia, lugar donde supuestamente estaban desvalijando un vehículo, en la vivienda de Elio José Díaz, el cuarto abatido.
Funcionarios estarían tras la pista de Colmenárez, a quien conocen como El Tarabana, y de El Dilver, quien supuestamente lideraba los hechos delictivos, manejaban varias informaciones de estos jóvenes y el viernes los sorprendieron en el sector Santa Teresa, arrastrando a un joven que aparentemente no tenía nada que ver en el hecho.
En la casa de Díaz, localizaron un Hyundai Accen gris, que fue robado el pasado 14 de enero. El 15 de enero su dueño fue a colocar la denuncia del mismo. El propietario reconoce a El Tarabana y El Dilver como las personas que lo despojaron de su vehículo.
Trascendió en voces de los vecinos de la zona que no se quisieron identificar por temor a represalias que Díaz no pertenece a una banda en específico, sino que delincuentes de distintas partes de la entidad larense llevan los vehículos hasta allá y él se encargaba de picarlos.
De los cuatro abatidos, solo ElDilver” tenía antecedentes por el delito de lesiones del año 2012.
Las investigaciones por parte del Ministerio Público y del mismo Cicpc ante los hechos continúan.
Lo llamaron por teléfono
A las nueve de la noche del viernes, en el sector Santa Rosalía, al oeste de Barquisimeto, Luis Enrique Guilllarte (32), fue asesinado de múltiples balazos, una hora más tarde en la calle 8 con 2 del barrio San Francisco, fue ultimado Junior José Araujo Durán (34), según indicó sus familiares el hombre recibió una llamada y al salir de la vivienda fue interceptado por unos motorizados.
Este sujeto tiene antecedentes por porte ilícito, robo agravado, entre otros estuvo recluido en la cárcel de Uribana y también en Cepella, la cárcel de Guanare.
Huelga en Cicpc
A las 11:21 de la mañana de ayer, los 72 detenidos que están en el Eje de Homicidios del Cicpc recluidos cantaron el Himno Nacional y se declararon en huelga de hambre.
Reclaman por el hacinamiento, tienen que dormir hasta parados, hacen sus necesidades en vianda, y cada vez les hacen requisa. Quieren visita y piden ser trasladados hasta los penales.
Familiares pasaron agua y caramelos, con lo cual se mantendrán hasta que cesen la huelga. Indicaron que levantarán la acción una vez sean escuchadas sus peticiones.
