Desde las 8:00 de la mañana y hasta horas del medio día, choferes que circulan por el oeste de la ciudad de las rutas A, 19, 13, 1 y 6, mantuvieron cerrada la avenida principal de La Carucieña, como medida de protesta ante la inseguridad que los mantiene azotados durante sus labores.
Con sus vehículos estacionados en plena vía, esperaban respuestas de las autoridades quienes con el pasar de los meses no han ofrecido soluciones viables a este problema, mientras que alrededor de 15 unidades son asaltadas a diario sin que los delincuentes reciban el justo castigo.
Edgar Pérez, directivo de la asociación civil Ruta 6, expresó que el sector sur oeste de la ciudad es el más afectado por la inseguridad.
“Hicimos esta toma porque estamos cansados de dirigirnos a las organizaciones gubernamentales para pedir seguridad. Estamos dispuestos a prestar el servicio de transporte público, siempre y cuando nos apoyen y atiendan nuestras peticiones”.
Hizo un llamado tanto a la Gobernación, como a los representantes de la Municipalidad y el Core 4 para que se encarguen de brindar mayor seguridad a los trabajadores del volante con alcabalas, puntos de control y revisiones.
“Necesitamos colaboración y hacemos un llamado a las autoridades de seguridad del estado para que nos presten ayuda. Lo que queremos es trabajar tranquilos y sin miedo de ser asaltados”
Por su parte, Francisco Díaz, chofer de una de las líneas de rapiditos del oeste afectadas, destacó que la inseguridad ya es insoportable, de dos a cuatro carros diarios son robados, sin importar la hora o el número de pasajeros que lleve el vehículo. A ello se le suma el mal estado de las vías que se encuentran repletas de huecos.
“Los gobernantes solo han hecho promesas y ninguno cumple. Tenemos las calles llenas de cráteres y nadie se aboca a repararlas. Además el punto de control de la Guardia Nacional de La Carucieña está de adorno, los malandros nos roban y se van como si nada”.
Sólo de la ruta de rapiditos, más de 30 choferes han sido robados, siendo las zonas más peligrosas La Carucieña, 5 de Julio, Lomas de León y José Félix Rivas.
“Los robos son el pan nuestro de cada día, nos cansamos de colocar las denuncias en el destacamento 1 para llevar las estadísticas de los asaltos pues la afluencia fue tal que los libros quedaron repletos. Lo único que nos queda es encomendarnos a Dios para que nos cuide y llegar bien a casa al final del día”.
Fotos: Jairo Nieto
