Debido a la gran cantidad de expedientes que aún evalúa el Comité Intergubernamental del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), por sus siglas en inglés) el veredicto sobre la manifestación venezolana los Diablos danzantes de Corpus Christi se dará a conocer este jueves.
«Es una reunión que se prolonga porque son muchos pilares a evaluar», expresó desde la capital francesa, el viceministro para la Identidad y Diversidad Cultural del país, Benito Irady, a través de Venezolana de Televisión (VTV).
Este miércoles el comité inició sesión a las 9:30 de la mañana (hora francesa) y debido a observaciones emitidas por los especialistas con relación a las 36 manifestaciones postuladas, las discusiones se prolongaron.
«Algunos recursos informativos de las manifestaciones no llegaron a tiempo al órgano subsidiario y esto se ha sometido a consulta por el comité», agregó Irady.
Hasta las 9:00 de la noche (hora francesa), en la sede parisina de la Unesco, la discusión estaba acentuada en Omán, puesto que las evaluaciones se realizan por orden alfabético. Aún faltan por discutir las postulaciones de Corea, Rumania, Arabia Saudita, España, Macedonia, Turquía, Emiratos Árabes Unidos, Venezuela y Vietnam.
Las 11 cofradías de diablos de Turiamo, Ocumare de la Costa, Cuyagua, Cata y Chuao, en Aragua; Patanemo y San Millán, en Carabobo; Naiguatá en Vargas; San Rafael de Orituco en Guárico; Tinaquillo en Cojedes y San Francisco de Yare, en Miranda ya tienen el visto bueno por el comité por cumplir con los requisitos necesarios para ser considerados Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Hasta este momento se han incluido en la lista patrimonial manifestaciones latinoamericanas como el Frevo o expresión artística del Carnaval de Recife, en Brasil; el festival religioso de San Francisco de Asís en Quidbó, Colombia y el Ichapekene Piesta, la fiesta más grande de San Ignacio de Moxos, la capital folclórica del departamento de Beni, en Bolivia.
Ecuador también integra la lista con el tejido tradicional del sombrero fino de paja toquilla, un proceso artesanal que puede durar entre un día u ocho meses, según su calidad y finura.
