La urbanización Rafael Caldera ubicada al oeste de Barquisimeto fue construida en los años 70 y pensada como una solución habitacional para la clase media y profesional, pero hoy luce como cualquiera de las invasiones que existen en la parroquia Juan de Villegas.
La avenida 20, que es la principal entrada al sector está invadida de huecos y maleza. El sentido norte-sur de esta arteria está inoperante.
Tres huecos que, según los vecinos, se formaron en ese tramo durante los últimos 15 años obligaron a los conductores a tomar el sentido sur-norte, es decir, que solo hay un canal para entrar y salir.
“La vialidad de la Rafael Caldera no sirve desde hace 15 años y han pasado gobernadores y alcaldes, pero nadie ha venido a solucionar este problema”, comentó Carmen Colmenares, vecina del lugar.
Encima de lo que anteriormente era la capa asfáltica de la 20, ahora se observa una capa de barro seco y en algunos de los sectores la maleza invadió lo que era el canal de circulación. “Esto es un problema para nosotros porque el viento levanta ese tierrero y nuestros niños se enferman de asma, gripe y tos, cómo es posible que esta vía principal tenga tanto tiempo así y hemos hecho llamados a las autoridades, pero no obtenemos respuesta”.
María Hernández, se quejó porque las avenidas 18, 16, 14 ,10, 6 y 2 también están invadidas de huecos. “La vialidad está malísima por eso es que los rapiditos ya no pasan por aquí, ellos dicen que sus carros presentan fallas debido al mal estado de las vías y los Ruta 15 trabajan hasta las 5:00 de la tarde por la inseguridad, ya a esa hora no hay carro para La Caldera”.
Hernández aseguró que en la comunidad no hay ladrones, pero llegan azotes de barrios cercanos como El Olivo, Santa Isabel, La Playa “caminar por estas calles luego de las 7:00 de la noche es un peligro”.
Jenny Delgado agregó que las rutas recolectoras de basura pasan cada tres días por el sector pero los operarios les exigen 10 bolívares por cada bolsa que se lleven. “Si uno no les paga 10 bolívares por cada bolsa las dejan en el frente de la calle, es decir que si son cinco hay que pagar 50, es un abuso, uno paga en el recibo de la luz el servicio del aseo, entonces quiere decir que uno va a pagar dos veces el aseo y con sobreprecio, no es justo”.
Fotos: Edickson Durán
