Jorge Hernández, presidente de la Liga Profesional de Baloncesto (LPB) y propietario de los Guaros de Lara, anunció que “vendrán sanciones muy duras” ante los hechos de violencia que se susciten sobre los tabloncillos, en declaraciones emitidas mediante un comunicado del circuito, toda vez que se encuentra en Taiwán para presenciar el campeonato mundial sub12 de béisbol.
“Debemos tomar medidas más fuertes que las contenidas en el reglamento”, admitió Hernández, quien convocó a una reunión extraordinaria de propietarios debido a los hechos de violencia que empañaron el final del séptimo encuentro de la serie final entre Marinos de Anzoátegui y Cocodrilos de Caracas en el gimnasio Luis Ramos de Puerto La Cruz. “Estamos muy tristes con todo lo que ha pasado”, reconoció.
Hernández pidió además “disculpas a todo el pueblo venezolano por lo sucedido”, al admitir que “en lo personal estoy muy molesto porque esto no debió suceder bajo ninguna circunstancia, pues nosotros condenamos la violencia desde todo punto de vista y porque la LPB hace un esfuerzo muy grande durante todo el año para brindar al país un espectáculo de mucho nivel”.
Considera que “no es justo que la irracionalidad acabe de esa manera con este espacio” y dijo que llamará “a los dueños de equipos para convocarlos a una reunión extraordinaria y allí debemos tomar medidas ejemplares, mucho más fuertes que las que existen en el reglamento”.
A su juicio, además de las sanciones hay que “plantear la necesidad de establecer castigos de orden tributario a los equipos que incurran en excesos, control de venta de bebidas alcohólicas, cierre de los gimnasios al menor hecho de violencia, juegos sin público, multas económicas mucho más fuertes, auditoría a los procesos de venta de entradas, coordinación con los cuerpos de seguridad al más alto nivel y otras medidas que estudiaremos”.
Alejandra Benítez, Ministra del Deporte, también condenó los hechos y anunció medidas de control.