La ciudad como tema – Autopistas engañosas

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Los economistas Gilles Duranton y Matthew Turner, de la Universidad de Toronto, demostraron la existencia de una “ley fundamental de la congestión” según la cual ampliar las vías o construir otras nuevas nonecesariamente mejora la fluidez del tráfico. Ellos afirman que los beneficios de la reducción de los tiempos de viaje que resultan del mejoramiento de la vialidad son solo temporales y muy inferiores a lo esperado considerando sus elevadísimos costos pues los nuevos ensanches son víctimas de su propio éxito: atraen a más automóviles y con ello vuelven a congestionarse.
Esto no quiere decir que esas inversiones no sean necesarias, sino que para aliviar la congestión, además de ensanches, se necesitan de otras medidas comoequilibrar la estructura urbana,limitar el ingreso a las áreas congestionadas, estimular el sistema de transporte masivo y otras más. Con frecuencia debe considerarse una mezcla de estrategias.
Quienes conocieron la congestión de la intercomunal Barquisimeto-Cabudare cuando ella era la única vía existente entre esos poblados, recordarán cuan desesperante era circular en horas pico. Pero si la comparan con la de ahora, luego de construida la Ribereña, reconocerán que la situación hoy es tan desesperante como lo era entonces y bien vale preguntarse qué ha fallado para que, después de décadas de inversiones millonarias estemos prácticamente en el mismo punto de partida. Aceptémoslo: la autopista, por si misma, no resolvió la situación.
En cambio la circunvalación norte sí alivió la congestión de la Av. Libertador al desviar el tráfico regional que antes pasaba por la ciudad, solo que ahora la superficie que ocupaban las gandolas la ocupa el Transbarca. Algo parecido debe ocurrir cuando se construya la autopista al Este de Cabudare que desviará el tráfico regional entre el Fuerte Terepaima y Zamurobano, sacándolo de la intercomunal.
Una de las razones de esa congestión de la Ribereña es el desbalance entre el número de puestos de trabajo en Barquisimeto y el número de viviendas en Cabudare. Romper esta asimetría significa corregir el desbalance urbano existente entre Barquisimeto y Cabudare. Requiere desarrollar más puestos de trabajo en Cabudare y más viviendas en Barquisimeto. Hay que lograr que los de Palavecino, en una proporción importante, no tengan que acudir a Barquisimeto para trabajar y que los de Iribarren no se vean obligados a vivir en Cabudare. Nada fácil de lograr pues esto significa mantener este objetivo por muchos años y trabajar mancomunadamente los planes de desarrollo urbano de ambas ciudades.
Un modo de descongestionar las áreas centrales esmediante el pago de una tasa por circular en ellas, es lo que aplican en Londres y Singapur: al entrar al centro un lector automático de la placa del auto carga a la tarjeta del conductor un monto tal que lo estimulará a utilizar el transporte público. Este sistema fue aceptado solo después de muchas discusiones públicasy demostrar que erapráctico, efectivo y que representa importantes ingresos adicionales para mejoras en el sistema de transporte público.
Aceptando que se quiere desarrollar el Transbarca como un sistema de transporte masivo, Barquisimeto tiene que decidir cuáles serán los futuros corredores viales de ese sistema, superando la improvisación electorera con que lo han implementado, atreverse a densificar esos corredores para facilitar el movimiento a más gente y decidir también, que políticas se aplicaran en la zona central para desestimular el ingreso de automóviles y la congestión que ellos causan. Esto puede implicar, entre otras cosas, el reducir el número de puestos de estacionamiento disponibles en las calles del interior del centro, ofreciendo a los conductores la posibilidad de llegar hasta torres de estacionamientoubicadas en la periferia del centro, o, mejor aún, dejando el automóvil en Cabudare para utilizar un sistema de transporte que sea al mismo tiempo, efectivo, rápido y masivo. Sin embargo, hay que estudiar con mucho cuidado cuantas torres serán necesarias para acoger una parte importante del tráfico que quiere entrar al centro y el impacto que significa una cola interminable de vehículos tratando de conseguir un puesto. En estas cosas no hay que apresurarse. El Transbarca es un buen ejemplo de cuan costoso es improvisar y saltarse las instancias técnicas.

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