Los vecinos del barrio Los Ángeles, en el lado sur de la avenida Florencio Jiménez, no están de acuerdo con aquellos interesados en mantener limpia la comunidad.
En la entrada a la barriada existe un letrero en el que se pide a las personas no dejar allí las bolsas de basura pues, además de brindar un panorama desagradable, constituye un foco de contaminación propagador de enfermedades.
Pero de acuerdo a lo que cualquiera puede observar, malos ciudadanos están en desacuerdo con esas buenas intenciones y, precisamente debajo del aviso, han establecido un basurero público que crece cada día ante la indiferencia de las autoridades a las que compete la limpieza de la ciudad.
Directivos del concejo comunal de Los Ángeles están cansados de llamar a Imaubar para que envíen un camión y obreros a retirar la montaña de basura pero no han tenido respuesta alguna.
Igualmente han exigido de los organismos de seguridad realizar recorridos por el sector para detectar a los inconscientes que diariamente se deshacen de sus desperdicios dejándolos en plena entrada a la comunidad.
María Ernestina Useche, una vecina, hizo un llamado a los habitantes de Los Ángeles para no seguir en esa práctica insana.
