Desde hace dos años y con más fuerza desde 2014 las madres venezolanas han tenido que ingeniárselas para conseguir los productos para sus bebés. Artículos que van desde la leche hasta pañales y medicamentos para atacar un cuadro febril.
Las largas colas en establecimientos comerciales han proliferado, así como el auge de personas inescrupulosas que se aprovechan de la situación y revenden los productos a precios muy elevados.
Por ejemplo, hoy en día el paquete de pañales que está regulado a 200 bolívares fuertes un revendedor puede cobrar hasta 1400 bolívares fuertes por el mismo producto, lo que significa un golpe muy duro al bolsillo del venezolano que no tiene tiempo para hacer las kilométricas colas por sus horarios de trabajo y quehaceres propios del hogar.
Una idea que parecía prehistórica, bochornosa y hasta chistosa como el trueque o cambio de mercancía opera en el país desde hace algún tiempo, como una especie de mercado de protección ante el descarado robo de los revendedores y la vista complaciente de las autoridades competentes que no terminan con este flagelo.
Es así, como en Barquisimeto surgió la cuenta en Instagram @ElTruequeBarquisimeto, como una necesidad de una ciudadana que por su embarazo tuvo que permanecer de reposo por indicación médica.
La idea de Carolina de Chacón, una joven barquisimetana de 32 años de edad y profesora de inglés, abrió la cuenta en la red social en vista de que no podía hacer colas para adquirir lo que su bebé al nacer necesitaría.
Concibió la idea de crear un canal que uniera a las mamás de Barquisimeto en el intercambio o trueque de aquellas cosas que no podían conseguir y así evitar tener que comprarlo a revendedores.
La cuenta fue creada en agosto de 2014 y para hoy 6 de febrero alcanza los 3.654 seguidores.
En conversación con Carolina, nos contó que ha sido un boom, ella es la única administradora de la cuenta hasta el momento, y su trabajo consiste en recibir a través del correo electrónico [email protected] las fotos de lo que las personas desean cambiar y por cual producto, así como su ubicación y números de telefónicos.
Carolina, hace la publicación en Instagram y allí comienza la “puja” por el producto, los interesados inmediatamente comienzan a escribir y preguntar sobre el producto para efectuar el cambio.
Nos cuenta que siempre trata de que se hagan cambios equitativos en relación a los precios, “que sea algo igualitario por ejemplo, un paquete de pañales por una determinada leche”, la idea es ayudarnos los unos a los otros y evitar la especulación que ya hay en la calle”.
Su trabajo llega hasta la publicación del artículo, pues es tarea de los interesados ponerse de acuerdo.
Recomienda no escribir direcciones, teléfonos o datos personales en las publicaciones por cuestiones de seguridad. Carolina no recibe ningún tipo de remuneración por el servicio.
Un canal que se extendió
Una idea que inició para operar en la ciudad de Barquisimeto se fue más allá, pues tiene a personas de Quíbor, Carora, San Felipe, Yaritagua, Valencia, Maracay, Maracaibo, Barinas, Acarigua.
No quiere abandonar este servicio hasta que la situación del país se normalice, por lo que le dedica varias horas de su día a prestar este servicio, incluso, a modo de confesión, nos dijo que seguramente necesitará de ayuda, ahora que nazca su niña.
Anécdotas
-Recuerda el día de la Divina Pastora cuando personas que venían de otros estados para la procesión hicieron contacto con ella para hacer cambios de productos, “los atendí en mi casa, vinieron personas de Valencia, Maracay, Barinas”.
-Otro momento que recuerda desde que abrió la cuenta fue que le enviaran la foto de dos pollos de Mercal para ser cambiados por pañales.
-Una persona de Maracaibo le ofreció una botella de whisky por 5 paquetes de pañales.
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