Aunque todavía resuenan las palabras del cardenal José Urosa Savino, arzobispo de Caracas, quien a finales de febrero afirmó que el Gobierno de Nicolás Maduro se burló del Vaticano con el diálogo, el anuncio de una exploración para unas negociaciones entre representantes del régimen y la oposición, a efectuarse en República Dominicana a principios del mes que viene, ha vuelto a despertar expectativas.
Posibilidad importante
Américo Martín, analista político y quien tiene experiencia en materia de conversaciones en representación de la oposición frente al gobierno de Hugo Chávez, considera que por primera vez se vislumbra una posibilidad importante de sacar adelante una negociación productiva.
Hay que destacar que por primera vez la dirección de la Asamblea Nacional está informando en forma sistemática y completa cada paso que va dando, dijo. Acabo de leer el comunicado y me declaro satisfecho. Dice que se ha dado un paso interesante, porque después de mucha renuencia el Gobierno aceptó invitar a México, Chile y Paraguay, que son los representantes propuestos por oposición, además de Bolivia y Nicaragua por parte del oficialismo, que no tiene a quién más buscar. Hay un preacuerdo con la comunidad internacional para supervisar lo que se va a realizar.
Aparte de ese paso se produjo una reunión técnica para estudiar la forma como se va a desenvolver la negociación. Ésta no ha comenzado, primero, por la falta de acuerdo en la invitación de supervisores; segundo por detalles técnicos para que no se desvíe hacia cosas que no tienen que ver con los aspectos a tratar; y, tercero, por cuanto falta por ratificar la agenda democrática de oposición y mayoría de comunidad internacional en cuanto a la purificación electoral, libertad de presos políticos y reconocimiento de la Asamblea Nacional. Hay que insistir en que la unidad mantenga al país informado en detalles. Otro punto importante es ver si se puede nombrar una delegación unitaria, nacional y representativa. Hay una mano tendida y esperamos que no se profundicen las heridas que ha habido últimamente.
Transparencia y resultados
El Dr. Guillermo Palacios, secretario general de Un Nuevo Tiempo en Lara, manifestó que su partido reitera la posición de apoyo a la negociación para resolver la crisis del país.
Pero, debe tener garantías de transparencia y resultado, enfatizó. Representantes de gobiernos e instituciones internacionales estarán pendientes de que se cumplan los acuerdos. El fracaso que ha habido en los intentos por llegar al diálogo es de este régimen maula, que ya está cayendo en default en cumplimiento de acreencias por la crisis.
Tenemos que forzar por las vías necesarias que, además de buscarle solución a problemas del pueblo, haya equilibrio en el proceso electoral presidencial que se avecina.
Nada de cohabitación
El profesor Armando Prado, Secretario de organización del Movimiento Izquierda Democrática, considera que los representantes de la oposición deben ser muy cuidadosos ante un régimen que ha utilizado el pretexto del diálogo para sacar ventaja e implementar sus nefastas actuaciones.
Cuando se presenta una crisis hay que apelar al diálogo, pero este debe ser muy productivo en resultados, expuso. Las reglas deben ser muy claras. La contraparte a las conversaciones es la guerra, la cual no queremos; pero, tampoco que se vea este encuentro como una conchupancia o cohabitación con un régimen responsable de la falta de medicinas y alimentos, de una hiperinflación que nos angustia y de un clima de inseguridad y violencia sin freno, así como el desconocimiento del principal órgano político del país como es la Asamblea Nacional y la persecución a la disidencia con presos políticos. Y lo más importante es que haya acuerdos que se han venido esperando, como el de un nuevo Consejo Nacional Electoral que sea autónomo.
Claridad
Roberto Sánchez, secretario general de Acción Democrática, comentó que hasta en la guerra hay conversaciones entre las partes. Lo más cercano a nosotros fue el acuerdo concretado por el gobierno de Colombia con las FARC para ponerle fin a un conflicto de más de medio siglo. La imposibilidad de llegar a acuerdos con el régimen de Maduro es que éste pide cosas que no están en la Constitución, como aceptar una Asamblea Nacional Constituyente espuria, ilegal e inconstitucional, no sólo rechazada por la población venezolana sino por gran parte de la comunidad internacional. La representación opositora solicitará el cumplimiento del texto constitucional en torno a la Asamblea Nacional, el canal humanitario que está dentro de los derechos humanos y elecciones sin ventajismo ni trampas como las que practica este CNE. Bienvenido sea el diálogo si comienza y termina con condiciones ideales para resolver la crisis y lograr que la campaña presidencial se haga como debe ser.
