La producción petrolera ha registrado una caída sistemática desde 1998 y esta se magnificó entre 2013 y 2018 cuando Venezuela perdió 849.000 barriles diarios de petróleo, equivalente a 36,0%.
Así lo manifestó el diputado a la Asamblea Nacional, Jorge Millán, quien condenó que el gobierno de Nicolás Maduro haya acabado con la principal fuente de ingresos de nuestro país.
“Hoy vemos como nuestras instituciones están perdidas. PDVSA era una de las trasnacionales más importantes del mundo, un orgullo para los venezolanos. Pero la convirtieron en un despojo, destruyeron el aparato productivo y se robaron todo el dinero. Este deterioro obedece a un modelo de gestión del negocio petrolero caracterizado por la corrupción y la ineficiencia”, sentenció.
Asimismo, el parlamentario expresó que desde el nombramiento del presidente de PDVSA, el mayor general Manuel Quevedo, se ha acentuado el mal manejo de la industria petrolera y la producción ha colapsado y se ha contraído en 160.000 barriles diarios.
“Quevedo ha sido un presidente nefasto para la industria y Maduro le ha dado un poder plenipotenciario, y nuestro deber como parlamentarios es declararlo nulo”, dijo.
Las declaraciones fueron ofrecidas por el parlamentario, durante el debate sobre el decreto inconstitucional que le otorga Poderes Extraordinarios al Presidente de PDVSA.
En el acuerdo presentado ante la cámara se acordó: declarar la nulidad del Decreto 3.268 publicado en la Gaceta Oficial No. 4.136 por violar la Constitución, informar a los directivos de las empresas petroleras extranjeras que la suscripción de cualquier contrato o convenio basado en el Decreto bajo consideración carece de legalidad y por tanto podrá ser desconocido por un nuevo gobierno, y advertir a los directivos de PDVSA y del Ministerio de Energía y Petróleo que la adquisición de bienes, servicios o firma de contratos será considerado una usurpación de funciones con todas las responsabilidades administrativas y penales que ello implica.
Finalmente, Millán aseguró que “tarde o temprano todos estos funcionarios tendrán que presentarse ante la justicia por haber destruido refinerías, cerrado pozos o dejarlos sin producir. Nada ocurre para sanar la industria petrolera y nada ocurrirá mientras Maduro esté en el poder. A esta Asamblea Nacional le toca alzar la voz por millones de venezolanos que aspiran un cambio y que quieren que el país se recupere”.
