#COLUMNA Soliloquios de café: ¡Amemos a la patria… Salvemos a Venezuela! #2Jul

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“Lucho contra tres gigantes, querido Sancho; estos son: EL MIEDO, que tiene fuerte raigambre y que se apodera de los seres y los sujeta para que no vayan más allá del muro de lo socialmente permitido o admitido; el otro es LA INJUSTICIA, que subyace en el mundo disfrazada de justicia general, pero que es una justicia instaurada por unos pocos para defender mezquinos y egoístas intereses; y el otro es LA IGNORANCIA, que anda también vestida o disfrazada de conocimiento y que embauca a los seres para que crean saber cuándo no saben en realidad y que crean estar en lo cierto cuando no lo están…

Esta ignorancia, disfrazada de conocimiento, hace mucho daño, e impide a los seres ir más allá en la línea de conocer realmente y conocerse”.

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MIGUEL DE CERVANTES

Las naciones que caen peleando se levantan y las que se rinden están acabadas

Luchando resurgen

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Las causas perdidas son las que vale la pena luchar

“A cada hombre sobre esta tierra tarde o temprano le llega la muerte ¿y qué mejor manera de morir puede tener un hombre que la de enfrentarse a su terrible destino defendiendo las cenizas de sus padres y el templo de su Dios.”

HORACIO

El triunfo no es definitivo… El fracaso no es fatal…

¡Lo que cuenta es el valor para seguir adelante!

En la Victoria, estado Aragua, antes de entrar en batalla, el 12 de febrero de 1814, el general José Félix Ribas arengó a los adolescentes que lo acompañaban, ochocientos estudiantes de colegios y seminarios de la capital, incluyendo a 85 del Seminario de Santa Rosa de Lima, de Caracas, o de la Universidad Real de Caracas…

“Soldados: Lo que tanto hemos deseado se realizará hoy: he ahí a Boves. Cinco veces mayor es el ejército que trae a combatirnos; pero aún me parece escaso para disputarnos la victoria. Defendéis del furor de los tiranos la vida de vuestros hijos, el honor de vuestras esposas, el suelo de la patria; mostrarles vuestra omnipotencia…

En esta jornada que será memorable, ni aun podemos optar entre vencer o morir:

¡NECESARIO ES VENCER! ¡VIVA LA REPÚBLICA!”

La Operación Dinamo (en inglés: Operation Dynamo), también conocida como milagro de Dunkerque o evacuación de Dunkerque, fue una operación de evacuación de las tropas aliadas en territorio francés (después de que Francia fuera derrotada por el ejército alemán) durante la Segunda Guerra Mundial. Tuvo lugar en Dunkerque (Francia) a finales de mayo de 1940, y fue ideada, planificada y organizada por el almirante Bertram Home Ramsay y con apoyo del mariscal británico y comandante en jefe de la Fuerza Expedicionaria Británica (BEF), John Vereke Gort. La operación permitió rescatar a más de 200 000 soldados británicos y 100 000 franceses y belgas.

Una vez finalizada la Operación Dinamo, Sir Winston Leonard Spencer Churchill se dirigió al pueblo en la BBC….

“No tengo nada que ofrecer sino sangre, esfuerzo, sudor y lágrimas”.

Y a pesar del desánimo generalizado que se apoderaba de la población, se mostró desafiante. ​En su discurso (de poco más de media hora de duración), Churchill estaba advirtiendo a la población británica sobre el posible colapso de Francia y un intento de invasión por parte de los nazis. Así mismo, estaba motivando a la población británica y haciendo un llamado a Estados Unidos para que entrara en la guerra al lado de los Aliados. Entre otras cosas dijo:

“A pesar de que grandes extensiones de Europa y muchos Estados antiguos y famosos han caído o pueden caer en las garras de la Gestapo y todo el aparato odioso del gobierno Nazi, no vamos a languidecer o fallar…

Llegaremos hasta el final, lucharemos en Francia, lucharemos en los mares y océanos, lucharemos con creciente confianza y creciente fuerza en el aire, defenderemos nuestra isla, cualquiera que sea el costo, lucharemos en las playas, lucharemos en las pistas de aterrizaje, lucharemos en los campos y en las calles, lucharemos en las colinas…

¡NUNCA NOS RENDIREMOS!

E incluso si, cosa que ni por un momento creo que suceda, esta isla o una gran parte de ella fuera subyugada y estuviera hambrienta, entonces nuestro Imperio más allá de los mares, armado y protegido por la flota británica, cargaría con el peso de la resistencia, hasta que, cuando sea la voluntad de Dios, el Nuevo Mundo, con todo su poder y su fuerza, avance al rescate y a la liberación del Viejo.

Puede que tenga que luchar cuando no haya esperanza de victoria, porque es mejor perecer que vivir como esclavos.”

Cuenta la leyenda que hace historia que, cuando Winston Churchill se vio perdido porque Hitler iba a invadir a Inglaterra dijo que lo único que les quedaba era orar, y se armaron en todo el país cadenas de oración. Hitler iba en camino y nunca llegó; no se sabe que fue lo que lo detuvo en el camino. Al parecer una niebla muy intensa cubrió a Inglaterra y el ejército Nazi se devolvió para nunca más volver, después de eso la Reina de Inglaterra dijo:

“Le temo más a un ejército de personas orando… que a un ejército militar.”

¡EL AMOR A VENEZUELA DEBE SER SUPERIOR A LAS DIFICULTADES!

Maximiliano Pérez Apóstol

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