La periodista venezolana Andrea Igliozzi vivió una noche memorable el pasado 14 de junio en San Francisco, California, al llevarse ocho estatuillas en la ceremonia de los Emmy. Pero más que un triunfo profesional, el galardón se convirtió en una plataforma para alzar la voz en defensa de los migrantes en Estados Unidos.
Con una década de experiencia en territorio estadounidense y beneficiaria del Estatus de Protección Temporal (TPS), Igliozzi enfatizó el aporte de los migrantes, así como el sacrificio que significa dejar el país de origen en busca de una vida más estable y digna.
“Ser inmigrante no es fácil, pero es un honor. Somos trabajadores, luchadores, creativos. Venimos a sumar, a construir, a levantar este país con nuestras manos”, afirmó Igliozzi en un emotivo discurso pronunciado tras recibir el galardón, en un contexto político marcado por la decisión de la administración Trump de eliminar el TPS para determinados grupos de migrantes.
“En tiempos donde se nos señala, se nos juzga y se generaliza con tanto odio, me parecía importante aprovechar ese momento para decir en voz alta algo simple pero poderoso: los inmigrantes también hacemos el bien. También trabajamos con honestidad. También aportamos. También ganamos”, continuó Igliozzi.
Dedica sus galardones a los migrantes
Además, dedicó sus ocho Emmy a todos aquelos que atraviesan el tránsito hacia una vida más estable en el país, a sus familias, colegas y, en definitiva, a las comunidades que reciben a nuevos grupos de migrantes con empatía y comprensión.
“Venimos a sumar, a construir, a levantar este país con nuestras manos, nuestras voces y nuestros sueños”, concluyó, sin dejar lugar a dudas de que el aporte de los migrantes va más lejos que las estadísticas: deja una huella permanente en el alma colectiva de los Estados Unidos.