La ciudad de Hiroshima se prepara para una ceremonia histórica este miércoles, 6 de agosto, que conmemora el 80 aniversario del bombardeo atómico. El evento, en el Parque de la Paz, busca enviar un contundente mensaje antinuclear con la asistencia de un número récord de representantes de 120 países y regiones, incluyendo a Israel, Palestina y Ucrania. Rusia, sin embargo, no participará por segundo año consecutivo.
La seguridad ha sido reforzada en los alrededores del parque para el acto conmemorativo, que contará con la presencia de personalidades y diplomáticos de naciones clave como Estados Unidos. En la víspera, la ciudad se ha llenado de actividades, desde conferencias y un maratón por la paz, hasta los preparativos para el tradicional encendido de farolillos flotantes en el río Motoyasu, donde miles de personas depositan sus deseos de paz.
El alcalde de Hiroshima, Kazumi Matsui, leerá una declaración por la paz que hará eco de la frase «never give up» («nunca te rindas»), popularizada por el superviviente Sunao Tsuboi. La declaración subrayará la importancia de preservar los testimonios de los hibakusha (supervivientes) y alertará sobre la creciente percepción de las armas nucleares como herramientas de defensa.
Este 80 aniversario es particularmente emotivo, ya que el número de hibakusha reconocidos oficialmente ha caído por debajo de los 100,000 por primera vez desde que se estableció el sistema de certificación en 1957. El bombardeo atómico del 6 de agosto de 1945, seguido por el de Nagasaki tres días después, puso fin a la Segunda Guerra Mundial y dejó un estimado de 210,000 muertos en ambas ciudades.