La urbanización Colinas de Santa Rosa, ubicada en el este de Barquisimeto, se ha convertido en un foco de insalubridad y abandono. La maleza descontrolada, la acumulación de basura y las constantes filtraciones de aguas negras asedian a los residentes, quienes se ven obligados a convivir con olores nauseabundos, plagas de animales y un ambiente deplorable.
En la carrera 7 entre calles 1 y 1A, la entrada al cementerio municipal de Santa Rosa se ha convertido en un vertedero improvisado. La basura se amontona junto a la maleza crecida, mientras que las aguas negras brotan del subsuelo, creando un obstáculo pestilente para quienes transitan por la zona.
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Abandono en Colinas de Santa Rosa
El estado de la carrera 7 es un reflejo del abandono generalizado que afecta a la comunidad. El Parque Colinas de Santa Rosa y el cementerio municipal, ubicados en las adyacencias, también se encuentran en un estado deplorable, con la vegetación creciendo sin control y sin ningún tipo de mantenimiento.
Las condiciones insalubres de la carrera 7 no solo afectan a los residentes de Colinas de Santa Rosa, sino también a los feligreses de la Iglesia Nuestra Señora de la Consolación ubicada en la urbanización Santa Elena, quienes deben transitar por esta vía para llegar al templo.
