Los cardenales seguían sin encontrar sucesor para el papa Francisco el jueves por la mañana, lo que provocó una fumata negra en la chimenea de la Capilla Sixtina después de que dos nuevas rondas de votación en el cónclave se saldaron sin resultados concluyentes.
El humo negro se pudo ver a las 11:51 de la mañana hora del Vaticano al término de la segunda y tercera votación para elegir al pontífice que dirigirá la Iglesia católica, con 1.400 millones de miembros en todo el mundo.
Dado que nadie ha obtenido aún la mayoría de dos tercios necesaria, u 89 votos, los 133 cardenales regresarán a las residencias del Vaticano donde están aislados. Después de almorzar regresarán a la Capilla Sixtina para las votaciones vespertinas, que podrían llegar a ser dos.
Así como los cardenales reanudaron el cónclave el jueves, las multitudes volvieron a congregarse en la Plaza de San Pedro a la espera de una decisión. Tras la primera votación el miércoles por la tarde, que duró más de lo esperado, también se pudo ver el humo negro.