Aunque se reconoce que se trata de un tema al cual le falta un análisis más profundo, la venta de medios de comunicación privados e independientes a empresarios que de alguna manera pueden estar ligados al Gobierno nacional, genera preocupación por cuanto puede significar la afectación de sus líneas editoriales, al punto de ver diluidas las libertades de expresión e información hacia el beneficio del Gobierno nacional.
El profesor e investigador de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), Andrés Cañizález, recuerda que en principio se han producidos amenazas a la libertad de expresión en distintos tonos, primero con las agresiones a los periodistas (con 61 casos reportados en 2012 según la ong Espacio Público), luego con el uso marcado de las cadenas de radio y televisión por parte del expresidente Hugo Chávez y la aprobación de nuevas leyes en materia de regulación de la información. Paralelo a ello, destaca el crecimiento del aparato comunicacional del Estado.
“Este año tenemos una amenaza diferente en la cual hay que precisar o afinar el análisis, porque se nos ha presentado el caso de la venta de medios como unas negociaciones entre empresarios privados, pero hay un trasfondo en estas negociaciones porque se trata de empresarios que no vienen del mundo de la comunicación sino de otros sectores como el financiero, en algunos casos”.
Señaló que para la adquisición de un medio como Globovisión, que cuenta con una decena de procedimientos administrativos abiertos y una concesión a vencer en el año 2015, el comprador debe por lo menos contar con la venia del Ejecutivo Nacional para poder ejecutar una acción que de lo contrario simplemente le reportaría pérdidas. Este tipo de negocios se hace si se cuenta con la garantía de que se mantendrá en el tiempo.
Otra situación que a Cañizález le resulta preocupante, son los señalamientos muy precisos que se han hecho desde el poder político, a través de los cuales se les indica a los medios que deben cambiar sus líneas editoriales. Por ejemplo, esas reuniones del presidente Maduro con los propietarios de Globovisión, Venevisión y luego Televen, que le hacen pensar que se está al frente de nuevas amenazas que en el pasado no estuvieron en el tapete, al tiempo que se mantienen latentes los rumores del cambio de manos de otros medios no sólo audiovisuales.
Pero el peligro de la pérdida de la libertad de expresión, al contrario de lo que se podría pensar, no se limita sólo a los periodistas y el ejercicio de sus funciones,ya que en realidad afecta a toda la sociedad porque la libertad no se defiende por ser privilegio sino una necesidad para toda la ciudadanía. Suavizar una línea editorial a favor del Gobierno nacional perjudica al ciudadano que pierde ventanas para obtener puntos de vista distintos a quienes están en el Gobierno y la desaparición de un “libre mercado de ideas y opiniones” donde el espectador decida si ve un canal, oye determinada emisora radial o compra el periódico de su preferencia, en función de un Estado que le diga lo que debe hacer.
El objetivo es el contrincante
El liderazgo emergente de Henrique Capriles Radonski como alternativa de la oposición pudiera haber aumentado el interés del Gobierno nacional por expandir su dominio mediático, en un cambio de estrategia que varía de aquellos años en los que el Gobierno podía tener sus medios y dejar que otros hicieran vida transmitiendo todo lo que hacía la oposición, ante la direccionalidad política dispersa que caracterizaba a los partidos opositores.
“Estamos ante un hecho novedoso en el cual la oposición, en términos del número de votos, está consolidándose como una mayoría, mientras que el Partido Socialista Unido de Venezuela ha mermado un poco su caudal y, por otro lado, en los últimos seis meses se erigió y consolidó una vocería fuerte en Capriles Radonski. Las consecuencias de todos estos movimientos que hemos visto es una merma de la aparición pública del líder opositor por los medios radioeléctricos y en esta coyuntura apunta a liderar a quien tiene una ascendencia y puede marcar la agenda política”.
“No logran convencer a todos”
Sin embargo, para Tinedo Guía, presidente del Colegio Nacional de Periodistas, la forma de determinar cuál es la línea editorial de un medio de comunicación es ver la pantalla, oír las emisoras o leer los ejemplares de aquellos medios de los cuales se tenga alguna duda.
Por ahora, Guía desconfía del establecimiento de una hegemonía comunicacional, dado que a pesar de contar con una gran cantidad de medios oficiales, el Gobierno nacional aún no ha convencido a todos los venezolanos de que ha hecho bien su trabajo en los últimos años.
En estos momentos, expone, el periodismo venezolano tiene el reto de asumir la creación de conciencia ciudadana y generar información adecuada a los nuevos tiempos, con mayor inteligencia que antes del actual gobierno, ya que si bien había limitaciones para el ejercicio periodístico ahora estamos en un escenario más delicado para el manejo de la información. “Hay una contaminación de gobiernos de querer controlar la información, todo lo que se le dice al pueblo y eso debemos enfrentarlo”.
A su juicio, en los sistemas colectivistas de gobierno, como el socialismo y el comunismo, el individio no interesa sino el mantenimiento del aparato del Estado, “aunque si bien es cierto que en el capitalismo no come quien no trabaja, en los gobiernos colectivistas no come quien no obedece”.
Marianli Suárez y Ricardo Marapacuto ganan Premio Regional de Periodismo
El gobernador del estado Lara, Henri Falcón, entregará el Premio Regional de Periodismo Ramón Orellana 2013, así como la Orden General Jacinto Lara en sus tres clases, para reconocer el destacado trabajo de los comunicadores sociales de la región.
Este año el premio distinguió en la mención impreso Iván Claudio a la periodista Marianli Suárez, con un trabajo de investigación publicado en el diario EL IMPULSO que refleja la situación actual de vivienda en la región.
La mención Televisión Mariano Kossowski, fue para el corresponsal de Televen licenciado Gustavo Giménez.
El premio regional, en la categoría Radio Amílcar Segura, resultó ganador el licenciado Víctor Villegas.
La mención Reporterismo Gráfico fue otorgada a Ricardo Marapacuto del diario EL IMPULSO quien plasmó calidad y técnica especializada en cada una de las imágenes presentadas de los hechos ocurridos en el mes de abril.
En la mención Camarógrafos, el premio regional lo obtuvo Steven Granadillo, camarógrafo de Globovisión quien realizó y presentó la cobertura completa sobre la situación del centro penitenciario de Centro Occidente Uribana 2013.
La labor periodística institucional también es reconocida con el premio Ramón Orellana 2013, quienes se acreditaron con este importante reconocimiento fueron, la licenciada Magaly Alviárez, quien posee una amplia e intachable trayectoria de más de 10 años de ejercicio comunicacional en la institución, de la misma manera la periodista de Invilara, Klara Sierra. Finalmente el camarógrafo Gilberto Carrasco también obtiene el prestigioso galardón. En esta edición del Premio Regional de Periodismo Ramón Orellana 2010, participaron más de 40 comunicadores sociales y reporteros gráficos, quienes acudieron al llamado a concurso, realizado a principios del mes de Junio.
“Nuevo mecanismo para debilitar”
El presidente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa, Marco Ruiz, ve las negociaciones de los medios de comunicación independientes como una “versión más delicada y sutil” del control a la prensa. Si bien los medios no son adquiridos de forma directa por el Estado, con capital público, sí se conoce que sus compradores están relacionados con el sector oficial. El efecto que generan los cambios se ve en los cambios en la línea editorial de aquellos medios que han entrado en negociación.
“Es un nuevo mecanismo para debilitar la libertad de expresión y prensa. Estamos alerta porque ha ocurrido con dos medios importantes y digamos que la petición es respetar el derecho de los trabajadores y que el compromiso de los medios sea con el verdadero periodismo”.
Aunque ya se haya dicho que hay una radicalización del Gobierno nacional, Ruiz expresa que en cuanto a la libertad de expresión la arremetida ha sido permanente y constante, sobre todo en el tema del acceso a la información, con el aumento de la restricciones a los periodistas, tal como ha sucedido con casos como la Asamblea Nacional, donde se constriñe la libertad para trabajar por parte de los profesionales de la comunicación, quienes estan confinados a una sala adyacente, donde solo reciben la señal de la televisora oficial. Si bien parece formar parte de la cotidianidad no deja de ser alarmante. Otro caso fue el de la AH1N1, donde la ministra se negaba a dar información oficial en cuanto al número de casos que se habían diganosticado positivos. Una situación que debe ser atacada para evitar se cercene la información para los venezolanos.
