La panadería de la indigestión chavista

A nadie que quiera mantener su credibilidad, se le ocurre querer explicar o demostrar algo, con un escenario que de antemano contradice su filosofía, es decir, el presidente queriendo explicarle al país que el socialismo es muy bueno, puso como gran ejemplo, una panadería que a todas luces es un ejemplo de capitalismo, lo que demuestra que no tiene ni siquiera algo mejor con lo que demostrar su inviable socialismo-comunismo-capitalismo de estado, o sea, para demostrar que el toro tiene cachos y que los cachos son peligrosos, utilizo un perro y enseño los dientes del perro bravo, en fin, puras contradicciones y por ahí se va el hombre.
Ahora resulta que si la panadería está dentro de un cuartel o de un instituto que depende de los militares o tiene que ver con los militares, entonces la panadería es una maravilla, pero si la panadería está en una esquina de cualquier Ciudad o en un centro comercial, ojo pelado, es un pecado mortal, porque simplemente el gobierno no tiene control directo sobre la misma, lo que demuestra un egoísmo y un deseo exagerado de tener, de poseer, de dominar, lo que al final demuestra el deseo de ser propietario de alguna forma, porque se puede controlar y tener poder sobre lo que es tuyo y en el fondo lo que buscan los malandrines de éste gobierno es eso.
Ahora nadie sabe dónde estaba el Indepabis, la superintendencia de precios y costos y el  seniat, el día que el mismo presidente dijo que la panadería se ganaba el 50% de lo que vendía y supongo que los empleados deben vivir el mar de la felicidad en dicho negocio, etc.
Con éste cuento, queda demostrado que el gobierno utiliza lo que sea, capitalismos, fascismo, si le favorece y sino lo desecha, así de simple, el que quiera entender esto, solamente tiene que poner atención, no hace falta ser bachiller, ni tener ningún título de ninguna profesión.
Para el gobierno lo que haga el sector privado será malo y lo que hagan ellos, será muy bueno, de todas formas tenemos como salir de esta hipocresía y malvada forma de gobernar el 7 de octubre, en donde se demostrará que un a un pueblo decidido no lo detiene nada, la avalancha de votos será espectacular  y es que el flaquito tiene un gentío detrás de él, que lo va a acompañar por que los que andan con Capriles, no queremos que hayan más pobres, no queremos que se siga yendo la luz, no queremos que nos sigan matando en las calles, queremos que la gente tenga un buen empleo, que se pueda salir a la calle tranquilo, sin el miedo de que lo asalten a uno. Por eso y muchas otras cosas más, los expulsaremos de Miraflores, para comenzar una nueva etapa, la de la Venezuela democrática, decente y firme en sus convicciones de sacar a la república de este atolladero.