El slugger Eliézer Alfonzo confesó que “nunca pensó” que tendría los registros de los que es dueño en la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP), al reflexionar acerca del cuadrangular 98 en su carrera, conectado el pasado sábado en la victoria de Navegantes del Magallanes ante Tigres de Aragua en Valencia, 6-5.
“Cuando Robert Pérez pasó a Antonio Armas, tenía ya 39 años de edad y yo apenas tengo 33”, reflexionó antes del duelo dominical de Magallanes ante Cardenales en Barquisimeto. “Le dije personalmente la última vez que vinimos aquí, que venía a perseguirlo. Es una persona a la que he admirado muchísimo y con quien he hablado de bateo. También con Antonio Armas cuando jugué con su hijo en Criollitos de Venezuela”.
Reconoció que cuando recibió el golpe en su rostro, que ameritó más de 30 puntos de sutura, se sintió mal. “Pensé que cada vez que empiezo a prender la moto, como decimos los peloteros, me pasa algo aquí en Venezuela, pero gracias a Dios tuve una muy buena atención”.
De hecho, su doctor le dijo “que si me sentía bien, saliese a echarle pichón y gracias a Dios los medicamentos que he estado tomando me han quitado el dolor. Aunque estoy un poco inflamado, así mismo salgo al terreno de juego”.
Considera que al Magallanes le falta salir a jugar sin ponerse tanta presión y lo dijo en un meeting. “Hay que salir a divertirse, es un juego que hay que respetar y nos pagan por esto, pero cuando te metes presión, las cosas no salen bien. Tenemos que tener confianza”.
