La recuperación de la autopista Barquisimeto-Acarigua fue iniciada por el hoy llamado Ministerio de Transporte Terrestre después de unos cuantos accidentes y exigencias por parte de los usuarios de tan importante arteria vial.
Como se sabe, por allí se desplazan a diario miles de vehículos, muchos de ellos pesados, con destino a la planta de llenado de Pdvsa, Puerto Cabello o el Occidente del país.
Por falta de mantenimiento la carretera comenzó a presentar fallas como las de borde o hundimientos en diferentes sectores, especialmente entre La Campiña y La Miel.
Los trabajos iniciaron hace algunos meses pero, aparentemente, la empresa constructora encargada no dispone de suficiente maquinaria y personal por lo cual ha sido poco lo que han avanzado a pesar del tiempo transcurrido.
A eso hay que agregar que suspenden la recuperación de algunos tramos sin haberlos terminado para dedicarse a otros frentes que igualmente dejan sin concluir sin importar los perjuicios que causan a los usuarios.
Este martes los viajeros se encontraron con circulación en doble sentido en algunos tramos y al indagar las razones lo único que observaban eran promontorios de tierra o asfalto pero ningún obrero o maquinaria.
Por si fuera poco, a poca distancia de la salida hacia el caserío Gamelotal, en sentido norte-sur, hace ya unos cuantos meses hicieron unos trabajos para eliminar un profundo hundimiento de la capa asfáltica.
La primera parte de la obra se cumplió, pero a quienes dirigen esa contratista como que se les olvidó que debe restituirse la capa asfáltica de rodamiento para que el tránsito automotor pueda desarrollarse con normalidad, como ocurría antes de presentarse la falla.
Además, en el lugar no existe señalamiento alguno que indique a los conductores la necesidad de reducir al mínimo la velocidad para no perder el control en el tramo de tierra o granzón aque debe recorrer.
En horas de la noche el peligro es mayor debido a que a la falta de alguna señalización se agrega el que el sitio sin asfalto se encuentra luego de una curva y quien vaya con cierta velocidad no puede frenar a tiempo.
Algunos gandoleros desconocedores del obstáculo han tenido que maniobrar para no perder el control de sus pesados vehículos y caer en las hondonadas existentes a ambos lados.
Manuel Antonio Sepúlveda, uno de los gandoleros, exigió al Ministerio de Tránsito Terrestre aligerar los trabajos de recuperación de la autopista a fin de que se pueda transitar sin problemas entre La Campiña y Acarigua en esta temporada navideña y por ende hacerlo con menos riesgos de sufrir un accidente que empañe las celebraciones familiares, o al menos un susto o pérdidas económicas por las averías que puedan presentársele a su vehículo.
Igualmente que las autoridades del MTT en la región realicen una efectiva fiscalización de las obras para que se corrijan las fallas que se puedan estar presentando por carencia de equipos o de personal capacitado.
Fotos: Luis Salazar
